La definición de infidelidad no es igual para todas las personas y para todas las parejas. Hay quienes la circunscriben solo a los encuentros sexuales con terceros y quienes la amplían incluso a los mensajes por internet. En cualquier caso, es un hecho que esta traición a la confianza genera grandes daños emocionales. Al respecto, hoy hablamos de los motivos por los que una mujer comienza a ser infiel.
LOS MOTIVOS
No es posible generalizar y en cada caso, las razones pueden ser diferentes. Sin embargo, estos suelen ser algunos de los motivos más comunes.
1. CONEXIÓN EMOCIONAL
Si las infidelidades masculinas se producen, en general, por una motivación sexual, en las mujeres lo hacen por una carencia afectiva. Cuando la conexión emocional con la pareja es pobre, cuando la mujer se siente desatendida, sola y poco valorada en el seno de su relación, es posible que busque suplir ese vacío con otro. La falta de conexión emocional tras algunos años de relación puede facilitar la búsqueda de euforia en otra persona.
2. BAJA AUTOESTIMA
En muchas ocasiones, la infidelidad tiene más que ver con la persona infiel que con el vínculo en sí mismo. Es el caso de las mujeres que sufren de inseguridad y baja autoestima, y que tienen un estilo de apego ansioso. En ellas, la necesidad de aprobación externa es grande. Pueden recurrir a la infidelidad para sentirse valiosas, importantes y deseadas.
3. INSATISFACCIÓN SEXUAL
Aunque se piense que este es un terreno exclusivo de los hombres, muchas mujeres también son infieles debido a la insatisfacción sexual que experimentan con su pareja. Si los encuentros sexuales son escasos, de baja calidad o se vuelven rutinarios, pueden buscar la chispa y el placer en la figura de un amante.
4. IRA Y DESEO DE VENGANZA
Otro de los principales motivos por los que una mujer comienza a ser infiel es el deseo de vengarse de su pareja o castigarla. Esto puede suceder porque el propio compañero ha sido infiel en primer lugar, porque siente que no se comporta como debería o no cumple sus expectativas. Tal vez la pareja se muestra fría y desinteresada, pelea constantemente o es controladora. Quizá juzga y critica y no ofrece tiempo de calidad ni refuerzo positivo. En todos estos casos, la insatisfacción y la impotencia pueden llevar a ver la infidelidad como una vía para tomar represalias contra el otro.
5. TEDIO Y RUTINA
Es posible también que la mujer sea infiel porque su vida en pareja se ha vuelto monótona, tediosa y rutinaria. Ya no hay ilusión, pasión ni novedad. Si ha desaparecido el entusiasmo, un nuevo romance puede aportar esa dosis de emoción extra que la persona siente que necesita.
6. AUTOAFIRMACIÓN
En determinados momentos de su vida, la mujer puede atravesar una crisis de identidad que le lleve a necesitar reafirmarse. Para nadie es un secreto que la sociedad ejerce una gran presión estética sobre las mujeres; sentirse deseada por otras personas puede reafirmar el propio valor.
Durante la adolescencia, debido a la inmadurez y los complejos propios de la edad, la joven puede sentir que un mayor número de pretendientes aumenta su valía personal. Pero algo similar puede ocurrir cuando se acerca la crisis de la mediana edad; en este caso, la mujer puede sentir que necesita recuperar el tiempo perdido o reafirmar que aún es atractiva. Una infidelidad sirve para satisfacer este deseo. El hecho de no sentirse valorada o acercarse a una edad en la que se desea reafirmar la autoestima, son causantes de una infidelidad.
7. PROBLEMAS DE PAREJA
En la mayoría de los casos, son los problemas en la relación principal los que conducen a la infidelidad femenina. El amor se compone de pasión, intimidad y compromiso; la ausencia de uno de estos componentes (o la percepción subjetiva de que faltan) puede despertar el deseo de buscarlos en un lugar diferente. Si el vínculo principal no aporta seguridad, bienestar y satisfacción, y por el contrario, causa dolor, incertidumbre o sufrimiento, es más probable que se cometa una infidelidad.