Al menos 40 migrantes murieron en un incendio provocado por una quema de colchones en un centro de detención del Instituto Nacional de Migración (INM) de Ciudad Juárez, en la frontera norte de México, según indicaron las autoridades del país norteamericano.
Un incendio provocado en un centro de detención de migrantes de Ciudad Juárez ha dejado un balance provisional de 40 muertos y 28 heridos. Los hechos ocurrieron poco después de las 9 de la noche del lunes, cuando un grupo de migrantes encerrados bajo llave decidieron prender fuego a sus colchonetas para intentar frenar su inminente deportación.
Según ha confirmado el Instituto Nacional de Migración (INM), todas las víctimas son varones, 28 de origen guatemalteco, que habían sido detenidos ese mismo día en la ciudad fronteriza. A pesar de que los hechos se han producido en el interior de un centro federal, el Gobierno de López Obrador ha rechazado cualquier responsabilidad por lo ocurrido y ha culpabilizado a las propias víctimas de la tragedia.
«Esto tuvo que ver con una protesta que ellos iniciaron», ha asegurado AMLO en su primera intervención pública ante los medios. De las dos horas y cuarenta minutos que ha durado la Mañanera de este martes -la polémica conferencia diaria del Presidente- López Obrador ha dedicado menos de dos minutos para referirse a una de las peores tragedias migratorias que ha sufrido el país en los últimos años: «A partir, suponemos, de que se enteraron que iban a ser deportados o movilizados y como protesta, en la puerta del albergue, pusieron colchonetas, les prendieron fuego y no imaginaron que esto iba a provocar esta terrible desgracia».
Un vídeo captado por las cámaras de seguridad revela cómo varios agentes migratorios se alejan de la escena, sin mostrar ningún interés en abrir las puertas, mientras las llamas se propagan en el interior de las celdas. Las ambulancias y los rescatistas han trabajado durante varias horas en este centro de detención ubicado junto al puente internacional Stanton-Lerdo, a las mismas puertas de Estados Unidos.
La tragedia llega en un contexto de creciente presión migratoria en la región, con 2.76 millones de personas detenidas en la frontera entre México y Estados Unidos durante 2022. Según confirmaron las autoridades estadounidenses, el pasado mes de diciembre se alcanzó un récord de capturas con 251.487, lo que supone una media de más de 8.000 al día. Ante la presión de los republicanos, que gobiernan la mayoría de los estados fronterizos, el presidente Joe Biden anunció el pasado 5 de enero la puesta en marcha de un plan de 30.000 visas humanitarias mensuales para migrantes venezolanos, cubanos, haitianos y nicaragüenses. No obstante, estos permisos solo se pueden solicitar si se accede al país por vía aérea, dejando fuera a todos aquellos que traten de ingresar ilegalmente o se hayan quedado varados en suelo mexicano. Agencias