Un nuevo caso de violencia extrema se registró en el municipio de Cliza, se trata de una madre acusada por atentar contra la vida de sus dos hijas adolescentes y ahora es procesada por tentativa de infanticidio.
La denuncia inicial daba cuenta de un menor con una herida punzocortante sin embargo con las investigaciones del caso se descubrió que se trataba de tres menores heridos.
Según el reporte policial el caso se conoció tras el aviso de personal médico del Hospital de Cliza que dio cuenta de la presencia de un menor herido.
Según la valoración médica, el menor presentaba una herida en la espalda de 3 centímetros de largo y 5 centímetros de profundidad, la que fue provocada por un arma blanca. Misma que fue atendida por el personal de salud y se encontraba estable.
El menor de 14 años de edad fue auxiliado por sus amigos hasta el nosocomio, luego de que este les pidiera ayuda.
Los amigos del menor manifestaron a los efectivos policiales que llegaron al hospital que fue una mujer quien lo hirió y no solo eso, revelaron que las también hirió a sus dos hijas durante el ataque.
De inmediato los efectivos policiales salieron en la búsqueda de la mujer. Tras un patrullaje lograron ubicarla quien se encontraba junto a sus dos hijas.
En el momento de la intervención los efectivos policiales notaron de inmediato que las dos menores de 16 y 13 años estaban sangrando, por lo que procedieron con la aprehensión de la madre.
La mujer fue identificada como María L.F.V. de 33 años, quien fue traslada a dependencias policiales.
Las dos menores también presentaban heridas punzo cortantes, la adolescente de 16 años tenía una cortada de dos centímetros en el brazo izquierdo, la niña de 13 años tiene una herida de 3 centímetros en el costado derecho de su cuero.
Inicialmente las menores fueron llevadas al Hospital de Cliza, desde el hospital se anunció el traslado de los adolescentes heridos al Hospital de Punata.
LOS MOTIVOS
Al ser consultada sobre las heridas de sus hijos, la mujer trato de justiciarse ante los efectivos policiales, explicando que sus hijas escaparon de su casa saltando la pared trasera de la vivienda y al encontrarlas con el otro adolescente los apuñalo como “escarmiento”, un castigo ante su constante desobediencia, pues aseguró que no era la primera vez que lo hacían.
El caso fue remitido al ministerio público y es investigado por la policía.