El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha previsto que el próximo 8 de diciembre Lisa Montgomery sea ejecutada mediante una inyección letal en el centro penitenciario Terre Haute, en el estado de Indiana. Será la primera presa en recibir la pena federal después de 67 años.
De acuerdo a la Oficina Federal de Investigación (FBI), Montgomery confesó que, en diciembre de 2004, mató a Bobbie Jo Stinnett ―quien tenía 23 años y ocho meses de gestación— y secuestró a su bebé.
Condujo desde su casa en Kansas hasta la vivienda de su víctima bajo el pretexto de adoptar un cachorro. Tras cometer el crimen, Lisa Montgomery se llevó a la bebé e intentó hacerla pasar por su hija.
Admitió su culpa y fue condenada a muerte hace trece años, en 2007. La niña que había secuestrado, Victoria Jo, fue criada por su padre y ahora tiene 16 años.
Dieciséis mujeres han sido ejecutadas por las autoridades estatales desde un caso histórico en 1976, según el Centro de Información sobre Pena de Muerte, pero Estados Unidos no ha utilizado la pena capital contra una mujer desde 1953.
En aquel año, Bonny Brown Heady fue condenada a muerte por secuestrar y matar a un heredero de seis años de un magnate, dueño de una serie de concesionarios de vehículos Cadillac. La ejecutaron en una cámara de gas junto con su novio.
En el caso de Lisa Montgomery, sus abogados argumentaron que padecía delirios cuando mató a Stinnett, pero su postura fue rechazada por la Corte. También afirmaron que sufría de pseudociesis, un trastorno que se da cuando una mujer cree falsamente que está embarazada y presenta signos externos de gestación. Agencias