La cuarentena rígida inició a mediados de marzo, cerrando todos los centros educativos, religuosos, recreativos y de diversión para evitar aglomeraciones que genere un contagio masivo de coronavirus.
Pese a que la cuarentena se flexibilizó estos siguen cerrados, generando una pérdida millonaria en locales y negocios nocturnos.
Los pubs, locales y discotecas llevan tres meses sin generar ningún tipo de ingresos por lo que sus dueños están en estado de emergencia ya que muchos continúan pagando los alquileres, sueldos de empleados, pero sobre todo sus impuestos.
«No pedimos volver a trabajar porque eso sería irresponsable (…) pedimos que las autoridades nos ayuden de alguna manera para sobrellevar esta situación», declaró uno de los afectados.
Algunos de estos negocios optaron a vender vales de consumo vía internet, los cuales podrán ser canjeados cuando vuelvan a funcionar, pero no tuvo el impacto esperado, por lo que otros anunciaron en sus páginas de Facebook la entrega de bebidas alcohólicas por delivery para mantenerse a flote.