Una menor de 2 años falleció a causa de las quemaduras de segundo y tercer grado que presentó en el 70% de su cuerpo, tras caerle una olla de sopa caliente.
El lamentable caso se registró en Fonseca, La Guajira, y debido a la gravedad de las lesiones en piel, la menor fue trasladada a la Clínica Reina Catalina, en Barranquilla, donde pese a los esfuerzos médicos, falleció.
Jairo Quiroz, director médico de la Clínica se refirió al caso y entregó recomendaciones para evitar accidentes caseros, que para esta época del año tienden al aumento.
«Fue una quemadura considerable, la niña prácticamente se introduce dentro de la olla y sufre quemaduras de segundo y tercer grado», dijo el Quiroz.
El cuerpo de la menor fue ingresado a las instalaciones de Medicina Legal para luego ser entregado a sus familiares.
Se conoció que los padres de la niña son de origen venezolano y hace dos años residen en el departamento de La Guajira.
Infantes de 0 a 4 años son la mayoría de las víctimas por quemaduras.
Las edades de mayor ingreso a centros hospitalarios para recibir atención por quemaduras se concentra en infantes de 0 a 4 años de edad, (lactantes y pre-escolares), reveló la doctora Marvis Corro, jefa de la Sala de Quemados del Hospital del Niño (HN).
Y es que, durante el mes de diciembre aumentan los casos por lo que ya los hospitales se preparan para atender a los infantes quemados.
‘El servicio de quemados siempre está preparado y organizado para la atención de pacientes quemados, aún más en los meses de noviembre, diciembre y enero’, destacó la galena.
Dijo que los casos más frecuentes son quemaduras por escaldaduras durante todo el año, pero durante las fiestas decembrinas, aumenta la incidencia por quemaduras por pirotecnia como cohete, volcanes, estrellitas, cebollitas, entre otros.
‘No hay ni siquiera un artefacto pirotécnico que sea inocuo’, por lo que recomendó a la gente supervisar a sus hijos constantemente y no hacer compras a los niños de estos artefactos.
Corro dijo que los casos más frecuentes son quemaduras por escaldaduras durante todo el año, pero durante las fiestas decembrinas, aumenta la incidencia.