La Paz
La Policía Boliviana continúa elaborando el plan de captura del expresidente Evo Morales, quien tiene una orden de aprehensión en su contra por la presunta comisión del delito de trata de personas y quien ahora permanece refugiado en su bastión político del Trópico de Cochabamba.
“Los planes y órdenes de operaciones que está efectuando la Policía se están desarrollando y discutiendo de manera milimétrica para no tener ningún error y dar cumplimiento a lo que determina la justicia”, dijo este lunes el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo.
En una conferencia de prensa realizada en La Paz, la autoridad gubernamental reiteró que Morales fue creciendo políticamente, en el último tiempo, sólo “generando convulsión y victimizándose”.
Pero, “nosotros no vamos a aportar a ninguna de esas dos provocaciones. Por tanto, no vamos a poner en riesgo la vida ni la integridad de ningún ciudadano boliviano o extranjero dentro del territorio nacional, ni mucho menos vamos a poner en riesgo la vida de ningún policía”, afirmó.
Morales tiene orden de captura vigente por una investigación realizada en Tarija porque presuntamente embarazó a una menor de edad cuando todavía era presidente del Estado.
Sin embargo, el exmandatario, en reiteradas oportunidades, aseguró que sufre una persecución política e incluso, en diciembre de 2024, afirmó que es “víctima de un odio desenfrenado del Gobierno” que, según su versión, tiene un “batallón de jueces, fiscales, policías y medios de comunicación, que ignoran el principio constitucional de presunción de inocencia” para “lincharlo”.
El fiscal general del Estado, Roger Mariaca, pidió no “desviar” ni “entorpecer” las investigaciones por el caso de trata de personas y dejó en manos de la comisión de fiscales la decisión de incluir en la investigación al ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, y la fiscal departamental de Tarija, Sandra Gutiérrez. Agencias
