El subalcalde de la comuna Adela Zamudio, Andrés Palacios, informó que el segundo horno crematorio comenzará a funcionar desde el miércoles en el Cementerio General de Cochabamba, el cual servirá para que las familias de pacientes que murieron por Covid-19 puedan optar por este servicio sin necesidad de esperar las listas de espera que antes se tenía.
Detalló que la instalación de ese horno requirió una inversión de más de 1,1 millones de bolivianos. «El costo del horno es de aproximadamente 950 mil bolivianos, pues se trata de un equipo de última generación, más la obra gruesa, calculada en 200 mil bolivianos», precisó.
Explicó que este martes se procederá a realizar la prueba en vacío por el lapso de 30 horas, luego podrá comenzar a cremar hasta 15 cadáveres por día. Recordó que, por recomendaciones de la Sala Situacional, se tiene un frigorífico a lado del crematorio, para guardar cuerpos de fallecidos.