El famoso G-8 conformada por los clubes Always Ready, The Strongest, Real Potosí, San José, Aurora, Municipal Vinto, Nacional Potosí y Real Santa Cruz, fijaron una posición con respecto a la cuestionada licitación que llevó adelante la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) y posterior desenlace, donde Gol TV quién fue la ofreció casi 50 millones de dólares por cuatro años terminó siendo marginada, y adjudicaron a una empresa que ofrecía 46 millones.
“Por tal motivo el G-8…, tomamos la siguiente medida, de NO aceptar ningún contrato realizado por el Comité Ejecutivo con la empresa que se habría adjudicado los derechos de televisión, expresando nuestro total desacuerdo mientras no seamos tomados en cuenta en la comisión de adjudicación, motivos que nos llevan a realizar esta importante postura”, señala parte del fuerte comunicado.