En audiencia de procedimiento abreviado, el Juzgado de Instrucción en lo Penal Cautelar 14vo de Santa Cruz dictó 30 años de cárcel para Andrés F.C., de 39 años de edad, acusado de la violación de sus tres hijas de 15, 8 y 4 años.
La fiscal del caso Laura Rojas informó que el hecho se conoció el 21 de diciembre cuando la adolescente de 15 años, una de las víctimas, decidió romper el silencio y confesó a su madre que su padre cometía las agresiones sexuales contra ella y sus hermanas cuando se quedaban solos.
Según la explicación que les daba el acusado, era “normal” que los padres hagan eso con sus hijas. La menor aseguró que su progenitor la violó desde sus 9 años y a las otras dos menores durante este año.
La autoridad lamentó que esta situación se registra desde hace “mucho tiempo” y finalmente fueron las víctimas las que se animaron a denunciar. Según las investigaciones estos vejámenes comenzaron hace seis años cuando la mayor de las víctimas tenía solo 8 años. Mariaca detalló que las niñas solo tenían 14, 8 y 4 años.
El padre de familia ya identificado es acusado de violar a sus tres hijas de 14, 8 y 4 años de edad, informó este viernes, 23 de diciembre, el fiscal Departamental de Santa Cruz, Roger Mariaca. El agresor se encuentra aprehendido y a la espera de su audiencia cautelar donde un juez determinará su situación jurídica.
“Al Ministerio Público nos ha llegado una denuncia, con relación a una violación agravada que se dio de parte de un padre biológico a sus tres hijas de 14, 8 y 4 años”, señaló Mariaca.
Según el fiscal de distrito los vejámenes comenzaron cuando la mayor de las víctimas tenía solo 8 años, es decir hace seis años, actualmente tiene 14.
“Tenemos a este padre ya aprehendido y próximamente cautelado, en el cual el Ministerio Público va solicitar la medida excepcional de detención preventiva en el penal de Palmasola y realizar las diligencias lo más pronto posible”, manifestó Mariaca.
“No podemos permitir que este tipo de personas estén libres por las calles, ha cometido un delito tan grave contra la vida de estas tres menores de edad, finalizó.
¿Por qué un padre de familia puede llegar a cometer un delito de esta naturaleza? Marynés Salazar, psicóloga y directora de la Asociación Psinergia, identifica que una de las causas para la violencia sexual es la banalización de la sexualidad de las personas. Otra causa, que en los últimos tiempos se ha convertido en un detonante, es que se hace uso de la imagen de las niñas, niños y adolescentes como objetos eróticos.
“Se ha banalizado mucho la sexualidad de las personas, se ha banalizado mucho el cuidado del cuerpo (…). El hipersexualizar la imagen de las niñas, de las adolescentes, maquillarlas, hacerlas participar de eventos de belleza, en pasarelas hace que la gente vaya perdiendo la mirada protectora que tenemos que tener desde el mundo de los adultos para con los niños y niñas”, explica Salazar a la ANF. Además, que, la sociedad no está fortaleciendo sus funciones que corresponden al rol de padre-madre; no se fortalece la idea de que los padres tienen que satisfacer las necesidades básicas de los niños y de las niñas.
Otro problema es que la sociedad se rehúsa a tener una educación integral de la sexualidad, que se busca un elemento preventivo sobre la valoración de cada etapa del desarrollo de las personas sobre su cuerpo. “Todo esto influye que haya hombres que no valoren a las niñas, niños como personas, no conocen las funciones que tienen que tener como padres y hacen uso de los cuerpos y caen en incesto”. Agencias