Un atroz crimen se registró en la ciudad de Oruro, donde una pareja de hermanos que sostenían una relación amorosa, asesinaron de la manera más cruel a su bebita que nació del fruto de su amor prohibido. Los asesinaron agarraron un cable metálico y estrangularon a la inocente criatura para luego esconder el cadáver en una bolsa plástica.
La directora de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia del municipio de Oruro, Carmen Miranda, confirmó este elemento oscuro, que al parecer terminó siendo uno de los que selló el destino de la niña que consiguió venir al mundo, pero que sus padres decidieron no darle la oportunidad de vivir ni un solo día.
«Se llegó a conocer que existe la posibilidad de que la recién nacida victimada, hubiera sido fruto de una relación incestuosa», apuntó la autoridad y explicó que la madre encarcelada acusada de infanticida, Lucía Q. C. de 22 años, mantenía una relación sentimental con su hermano Pedro Q. C. de 19 años, el menor de su familia.
Aún no se conocen las razones del por qué los detenidos dejaron que la recién nacida llegue al mundo o qué situación motivó el crimen de la bebé, ya que ninguno de los procesados ha querido, hasta ahora, colaborar con las explicaciones de los entretelones de este crimen.
Finalmente, se conoció que la hermana mayor de los sindicados como asesinos, fue la que descubrió el infanticidio y puso en conocimiento de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv) del departamento.
El Código Penal bolivianos en su Artículo 258 (Infanticidio) establece: Se sancionará con pena de presidio de treinta (30) años, sin derecho a indulto, a quién mate a una niña o un niño desde su nacimiento hasta sus doce (12) años, cuando.