Con los bolsillos vacíos, sin celular y con un fuerte remordimiento de consciencia quedó un hombre de 30 años, luego que fuera pildoreado por una bella señorita en un burdel de mala reputación.
El caso se registró la madrugada del sábado, el parroquiano se fue a continuar la celebración de navidad a un burdel de la avenida Siles. En el lugar, el hombre se puso a compartir bebidas alcohólicas con una linda dama que posteriormente no solo le robaría el corazón, sino su dinero.
Lo último que recuerda el parroquiano fue que bebió un vaso de cerveza que le invitó la mujer y perdió el conocimiento. Luego de un par de horas, el hombre se despertó en la calle y sin sus pertenencias de valor.
Con la ropa sucia y mojada por la lluvia, el hombre se apersonó a dependencias de la Felcc para denunciar el hecho.