Una banda de atracadores con acento peruano y chileno protagonizó un violento robo en la comunidad Palacio Tambo, San Lucas, de Chuquisaca, el fin de semana, robándole a una pareja de ancianos al menos 1,2 millones de bolivianos en efectivo, tarjetas de Entel y joyas.
Según informe extra oficial, el atraco se produjo la madrugada del sábado pasado, cuando seis delincuentes encapuchados ingresaron violentamente a una casa de dicha comunidad cinteña, golpearon y maniataron a los dueños, sustrajeron joyas y dieron con el botín de dinero.
Los delincuentes, que además portaban guantes negros –según la denuncia sentada en la Policía y que ya está en conocimiento de la Fiscalía–, amedrentaron a sus víctimas con cuchillos y amenazas de descargas eléctricas para que confesaran dónde tenían escondido el dinero.
En medio del atraco también propinaron golpes a la pareja, que acabó policontusa, según el informe médico preliminar proporcionado a este diario. Acorralados y amenazados de muerte, los ancianos indicaron a los asaltantes dónde tenían guardado su dinero: dentro de varios muebles de la casa.
Extraído el botín, la banda se dio a la fuga con paradero desconocido y hasta anoche la Policía no había logrado dar con los delincuentes que, según el testimonio de sus víctimas, tenían acento peruano y chileno.
SOSPECHOSA, A PRISIÓN
El fiscal departamental de Chuquisaca, Mauricio Nava Morales, confirmó de este hecho y detalló que los ladrones se llevaron dinero y joyas por un valor de 34.000 dólares, otros 400 mil bolivianos y una pistola calibre 22 y tres celulares.
Además, ingresaron a la tienda de la hija de las víctimas, de donde sacaron 30.000 bolivianos y monedas por 2.000 más.
En una bolsa había 80.000 dólares, y tres paquetes de tarjetas de Entel por un valor de 27.600 bolivianos, que también se robaron.
La investigación señala a una joven de 18 años que conocía a detalle el domicilio. La muchacha fue imputada por robo agravado y está con detención preventiva por seis meses en la cárcel San Roque de Sucre.
Según el testimonio de familiares de los viejitos que fueron atracados, la joven detenida de 18 años era la única persona que conocía la existencia del dinero, las joyas y las tarjetas, por ello están seguros de que sería la cómplice, que habría dado todos los datos a los delincuentes. Agencias
