La tarde del miércoles, efectivos policiales aprehendieron en fragancia a un sujeto de la tercera edad, identificado como Hernan G. C. quien se dedicaría a dopar pasajeros en buses de transporte interdepartamental.
En el momento de la aprehensión, el sujeto ya se estaba ganando la confianza de la que sería su próxima víctima, hecho que fue impedido por las fuerzas policiales.
«Se ha detectados una persona que estaría viajando pero con una identidad alterada, y son los funcionarios de tránsito que detectan que no coincidía con su carnet e inmediatamente se ha logrado determinar que esta persona habría cometido estos delitos con anterioridad», informó el sub director de Tránsito, Marcelo Gómez.
Tras ser aprehendido, efectivos policiales encontraron entre sus pertenencias varios somníferos, que son mezclados con bebidas o alimentos para poder ofrecerles a sus posibles víctimas.
«Habría cometidos este tipo de delitos con anterioridad, por lo que inmediatamente lo hemos aprehendido y hemos pasado el caso a la FELCC», añadió Gómez.
El sujeto tiene varios antecedentes penales por robo, realizando el mismo modus operandi, razón por la que los policías piden a las personas que hayan sido víctimas de peste sujeto, apersonarse hasta dependencias policiales para realizar la denuncia correspondiente.
De hecho, fue gracias a la denuncia de una de sus últimas víctimas que la policía pudo dar con el paradero del hombre.
Según el testimonio de su última víctima, el hombre se habría sentado a su lado dentro de un bus interdepartamental, que hizo el recorrido del trayecto Oruro – Cochabamba, primero les hizo charla y luego les ofreció refresco con lo que llegó a doparla, sustrayéndole grandes cantidades de dinero.
«Empezó a hablarme de la crisis, del dólar y demás, parecía buena gente y cuando me invitó un refresco no llegué a sospechar de él, hasta que sentí mucho sueño», contó la joven.
La policía realiza seguimiento a diferentes personas que ya fueron identificadas realizando este tipo de delitos.
Recomiendan a los viajeros no aceptar ningún alimento de personas desconocidas.
