Pobladores de Toco tomaron granja porcina

Pobladores de Toco, radicalizaron sus medidas de presión con una vigilia permanente que ya no solo demanda el cierre definitivo de una granja de cerdos, sino de la renuncia del alcalde de esta población, Saúl Rodríguez Camacho.

Un grupo de pobladores, en su mayoría agrarios, tomaron las calles adyacentes a la alcaldía y la granja de cerdos que está en conflicto; se organizaron en grupos para realizar la vigilia y preparar alimentos en ollas comunes.

El dirigente de los regantes, Grover Meneses, afirmó que la movilización es producto de un cabildo porque lamentablemente sus autoridades no escuchan las demandas de la población y que la contaminación ambiental en toda esa región es mayor día que pasa.

En anteriores días, se denunció que la granja de cerdos que se encuentra en esa región habría sido avasallada por decenas de pobladores y que incluso una centena de animales habrían sido eliminados, hechos que fueron desmentidos.

Cerco a la granja

Según el alcalde de Toco, la granja funciona hace 15 años y las autoridades anteriores no hicieron cumplir la licencia ambiental ni el cambio de uso de suelos.

Rodríguez Camacho dijo que respeta la vigilia y otras medidas de presión, pero que se debería priorizar el diálogo para encontrar una solución consensuada.

Un trabajador de la granja de cerdos denunció que hace 48 horas, no les dejan ingresar a sus fuentes de trabajo y tampoco permiten el paso a vehículos que transportan alimentos.

Los pobladores permanecen prácticamente las 24 horas del día movilizados, por turnos y no están permitiendo que se realicen las actividades de manera normal en la granja de cerdos.

La medida de presión en Toco es producto de las resoluciones de un cabildo donde participaron representantes vecinales, gremiales, agrarios, transportistas y otros sectores sociales.