Los efectivos policiales de la EPI Coña Coña en horas de la noche se encontraban realizando sus patrullajes de control diarios por las calles y avenidas de la ciudad.
Ellos transitaban cerca del puente Beijing cuando se percataron de la presencia de una persona de sexo masculino de aproximadamente 30 años que estaba sentado al borde de la estructura del puente, donde ya se han atendido varios casos similares de intentos de suicidio en ese lugar.
Rápidamente, los efectivos subieron el puente y comenzaron a persuadir al hombre para que no se suicide.
El sujeto les contó que quería suicidarse lanzándose del puente porque tenía problemas familiares y económicos, pasaron los minutos y los uniformados lograron convencer al hombre para que no se suicide.