Por una bici le destrozaron el brazo y pierna a machetazos

Un joven estudiante universitario, quien se trasladaba desde su casa de estudios en la Avenida Boyacá para su casa en el barrio Alcalá, de la localidad de Puente Aranda, casi pierde de la vida de mano de dos ladrones de ciclas.

Los delincuentes, de manera despiadada y enseñada, le propinaron seis machetazos en los brazos y piernas, dejándolo gravemente herido. Todo por robarle la bicicleta al joven estudiante.

Conocimos que los hechos se produjeron cuando el joven Kevin Hernández, de 21 años, salió de su casa estudios cerca de la calle 26 con Avenida Boyacá, en el barrio Modelia y dentro del túnel para el paso de ciclistas, fue interceptado por dos sujetos portando filosas armas blancas para robarle su bicicleta.

SEIS MACHETAZOS

Narró el joven que a eso de las 7:00 de la noche cuando cruzaba el túnel para los ciclistas, los dos sujetos de una vez le lanzaron seis machetazos, provocándoles heridas punzo cortantes en los brazos y piernas, para luego robarle su bicicleta, quedando él mal herido en plena calle.

Una patrulla que pasaba por el lugar, de inmediato trasladó a Kevin Hernández hasta un centro asistencial, donde gracias a los médicos, lograron estabilizarlo y evitar que falleciera desangrado producto de las graves heridas, las cuales requirieron casi 300 puntos de sutura.

El joven narró que está vivo de milagro, y que fue rápida acción de la Policía al llevarlo al Hospital lo que evitó consecuencias peores. 

Las heridas que le provocaron estos malhechores afectaron de tal forma el tejido que incluso dejaron al descubierto parte de los huesos de las extremidades superiores e inferiores. De no ser atendido con el tiempo suficiente el joven podría haber muerto desangrado.

INVESTIGACIÓN

La Policía al conocer del caso, se trasladó hasta el lugar y ahora con el apoyo de los videos de las cámaras cercanas al lugar del ataque, ubicarán a los responsables, de quienes se dijo serían unos reconocidos ladrones de bicicletas.

A quienes no les importa arrancarle la vida a una persona por hurtarle su vehículo de dos ruedas.