Vecinos notificaron a la Policía de Lara donde enviaron una comisión de funcionarios para la identificación y levantamiento del cadáver.
Llegaron familiares de la víctima, identificando como Yeison Antonio Rodríguez, de 19 años, el menor de cinco hermanos, quien residía en el sector. El cadáver presentaba un orificio de bala en la cabeza, sin salida. Desde diferentes puntos de la ciudad comenzaron a llegar al lugar los curiosos que debieron ser contenidos por los uniformados policiales quienes afirmaban que fue asesinado por una deuda. Entre los familiares se encontraba Belkis Rodríguez, la progenitora de Yeison Antonio, quien, en medio de su dolor, dijo que su hijo no trabajaba ni estudiaba y que lo vio por última vez la noche del martes. En ese momento, al informarle que “iba a dar una vuelta”, le sugirió no salir por los peligros que están presentes en la calle en horas de la noche pero no la había escuchado. Age