El presidente de la Federación de Empresarios Privados de Cochabamba, Luis Laredo, renunció a su cargo, a tiempo de denunciar presión y acoso de parte de políticos de turno en contra del sector privado.
“Las presiones e injerencia política del sector privado de Cochabamba han provocado una severa crisis en este sector que genera riqueza. En defensa de esta libertad fundamental consagrada en la Constitución Política del Estado me veo obligado a renunciar a la presidencia de la Federación de Entidades Empresariales Privadas de Cochabamba”, explicó.
Según el directivo, los políticos presionaron al sector privado para que tome decisiones que solo beneficien intereses personales y sectoriales por sobre la institucionalidad del bien común.
Sostuvo que, por tres años en que estuvo en el cargo, mantuvo la independencia política y defendió la iniciativa privada, pero esto tuvo un costo muy alto.
“El costo de la independencia de los poderes políticos ha sido muy alto. Hemos sido embestidos por un proceso de aislamiento con las instituciones de Estado que solo agravan la crítica situación de la región”, lamentó.
Laredo dijo que, como el poder político no pudo tomar la institución, ha emprendido una embestida contra su independencia. “La voz de defensa de la iniciativa privada y el desarrollo de la región han molestado a un sector de la política del departamento, que ha desplegado mecanismos de asfixia a la gestión”, afirmó.
Dijo que su renuncia “busca un bien mayor, el de generar un escenario propicio para la iniciativa privada”. A los empresarios pidió no caer en “falsos discursos de unidad que esconden otros intereses”.
CRISIS ECONÓMICA
A su salida del cargo, Laredo advirtió que la situación en la economía del país es preocupante, adelantando que se vivirá una desaceleración económica.
Dentro del análisis que presentó en su carta de renuncia señaló que la Unidad de Análisis Económico proyecta que el Producto Interno Bruto (PIB) departamental de Cochabamba a 2023, fue de 46.265 millones de bolivianos y se estima que para el cierre de este primer semestre el crecimiento alcanzaría a: 461,7 millones de bolivianos, lo que representa un 78% menos de crecimiento relacionado con el mismo periodo de 2023.
Dentro de las últimas apariciones públicas antes de dejar su cargo, el expresidente de los empresarios cuestionó el precio del dólar en el mercado paralelo, sus consecuencias directas en las importaciones y aseguró que el país se encontraba viviendo en una inflación disfrazada.