La selección de algunos ministros, pulseadas internas y el retorno de Evo Morales retrasan la posesión del nuevo gabinete. La ceremonia se realizará hoy después del mediodía. La cartera de Gobierno es la más disputada.
Se señaló que Luis Arce propondrá un gabinete transitorio, porque su objetivo es, el 22 de enero, reducir la cantidad de ministerios, con el objetivo de bajar el gasto público y enfrentar la crisis.
Sin embargo, Henry Cabrera se jugó porque será “un equipo definitivo”. Lo cierto es que a esta hora, dentro del MAS, y cuando Evo Morales se dispone a entrar a territorio nacional, hay pulseadas internas para definir el gabinete.
Para el ministerio de Gobierno, los nombres de Gustavo Torrico y del dirigente Henry Nina, que pugnaban por ese cargo hasta ayer, fueron descartados en las últimas horas. Sin embargo, se ha mantenido el de Álvaro Ruiz, quien es actualmente el presidente de la Federación de Asociaciones Municipales (FAM) de Bolivia.
En junio, la entonces ministra de Comunicación, Isabel Fernández, lo relacionó con el Movimiento Al Socialismo (MAS) y lo acusó de propiciar y organizar protestas, bloqueos y huelgas en Cochabamba y Tarija. El también alcalde de Uriondo, Tarija, declaró la semana pasada que el menos un miembro del gabinete de Luis Arce sería de esa región.
Aparece también en escena el abogado Wilfredo Chávez, quien, si es que llega al gabinete, podría ser uno de los que trabajó con Evo Morales, y fue ministro precisamente en esa cartera.
En el último tiempo, la exautoridad ha trabajado muy de cerca como abogado de Evo Morales y también junto a Luis Arce, ante la amenaza que se presentó en contra de su candidatura luego de que él reveló resultados de encuestas, durante la campaña. Fuentes cercanas al entorno presidencial señalaron que su experiencia es muy valorada.
Como otra opción apareció el nombre de Carlos Eduardo del Castillo. Se trata de un integrante de Columna Sur, allegado a la expresidenta del Senado Adriana Salvatierra, a quien también se menciona con posibilidades de asumir algún cargo, aunque se supo que ella preferiría candidatear en las elecciones subnacionales.
El tiempo que Salvatierra fue presidenta del Senado, del Castillo ejerció como su oficial mayor y era conocido como su “mano derecha”. Eva Copa asumió el cargo de presidenta del Senado e indicó que había apartado del cargo a Del Castillo porque era un puesto de libre nombramiento; sin embargo, el funcionario presentó un amparo constitucional alegando que tenía inmovilidad laboral ya que su esposa estaba embarazada.
Copa alegó que tenía a la esposa de Del Castillo trabajando como jefa de gabinete en la Vicepresidencia y lamentó que el Oficial Mayor recurra a esa figura para aferrarse al cargo.
Ahora, vuelven a encontrarse. Fuentes del entorno de la expresidenta del Senado confirmaron que el nombre de Copa está también en carrera como posible ministra de Gobierno. De hecho, otros informantes revelaron que hay una muy fuerte pugna entre ella y Adriana Salvatierra. De hecho, Copa es muy allegada a Choquehuanca, y Salvatierra a Evo Morales. Este caso muestra la pulseada interna.
En diciembre del año pasado, Copa denunció: “He sido hostigada, estoy siendo perseguida, están obstaculizando mi trabajo desde la Cámara de Senadores y con los funcionarios que ha dejado (Salvatierra)”, y de hecho, Del Castillo es uno de ellos. Agencias