Un grave error médico en el hospital Roberto Galindo de Cobija (Pando) puso en riesgo la vida de un adolescente de 16 años.
La madre del paciente, Tatiana A., denunció el hecho y calificó como “negligencia médica” lo sucedido. Según su relato, los médicos no le informaron del error y trataron de ocultarlo. El propio adolescente, al escuchar una conversación del personal médico, se enteró de lo ocurrido.
Tatiana explicó que su hijo había sido internado para una cirugía de pierna y que, para la intervención, se le había solicitado una cantidad de sangre con su grupo sanguíneo (O+). Sin embargo, al momento de la transfusión, le colocaron sangre de tipo A-, perteneciente a otra paciente.
La madre del menor explicó que su hijo presentó “algunas alteraciones, se puso mal, tenía los pies hinchados, su labio estaba grueso con poco color, tenía una reacción diferente y los médicos no me decían nada (…) a las 3 de la mañana comenzó a convulsionar, su latido estaba bajando y los médicos fueron a traer sus máquinas, pero no me decían nada, estaban callados, a cada rato lo miraban”.
La directora interina del hospital Roberto Galindo, Paola Burgos, admitió el error durante la transfusión sanguínea. Sin embargo, aseguró que el error se detectó a tiempo y se interrumpió la transfusión. «Teníamos dos pacientes, uno para quirófano y otro para quirúrgico (…) Hubo un error cuando se le estaba haciendo la transfusión, pero ellos (médicos) se percataron y se paró la situación ahí», afirmó Burgos. Agencias.