El dolor de huesos puede afectar a cualquiera, ya que la salud del sistema óseo depende de muchos factores, como hacer ejercicio o seguir una alimentación rica en calcio y vitamina D.
Sin embargo, las personas que sufren osteoporosis son más propensas a sufrir lesiones. Esta enfermedad hace que los huesos sean más débiles, ya que disminuye la masa ósea. Por ello, el hueso es menos resistente y más propenso romperse.
Sigue estos consejos para tener unos huesos fuertes.
1. ALIMENTOS RICOS EN VITAMINA D
La vitamina D favorece la absorción del calcio por lo que ayuda a la mineralización de los huesos. La deficencia de vitamina D, según afirma la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, puede deberse a malos hábitos alimenticios o a la falta de exposición solar, entre otras causas.
En casos graves, podría dar lugar a enfermedades como raquitismo en niños, y osteomalacia en adultos. También puede afectar al hígado y debilitar el organismo, ya que el calcio y el fósforo en sangre no se regulan correctamente.
Entre los alimentos naturales ricos en vitamina D destacan los pescados azules. El pescado azul contiene entre un 2 y un 5 % de grasa y es rico en proteínas. A su vez, contiene entre 7 y 22 ug de vitamina D por cada 100 gramos. Los pescados más recomendados son: Sardinas, Salmón y Arenque. Preparados a fuego lento o ahumado es como mejor conservan sus propiedades.
2. ACEITE DE BACALAO
Extraído del hígado del bacalao, este aceite se ha usado durante mucho tiempo para tratar la artrosis, una enfermedad crónica que afecta la superficie de las articulaciones (las desgasta) y provoca dolor de huesos cuando estos se rozan.
Esto se debe a su alto contenido en ácidos grasos omega-3, encargados, según este estudio realizado por la Universidad de Chile, de la desinflamación. Aunque antiguamente se recomendaba para el desarrollo del sistema óseo en los niños, hoy en día se suele emplear más como suplemento para aliviar los síntomas de dolor.
3. JENGIBRE
El jengibre es una raíz con propiedades analgésicas y antinflamatorias que puede ayudar a reducir el dolor causado por enfermedades óseas como la artritis. De hecho, según este estudio realizado por la Universidad Qazvin (Irán), es igual de efectivo que el ibuprofeno. Puede emplearse de formas distintas, aunque lo más común es tomarlo en té o aplicarlo en compresas. En ambos casos se utiliza la raíz macerada y agua caliente.
4. ORTIGA
La ortiga tiene propiedades diuréticas que ayudan a desinflamar las zonas afectadas por dolor articular o de huesos, tal y como asegura este estudio realizado por la Universidad Isfahan (Irán). Lo más habitual es tomarla en infusión.
Ingredientes: 1 cucharada de hojas de ortiga (15 g) 1 taza de agua (250 ml)
Preparación: Calentar el agua y, cuando llegue a ebullición, añadir la ortiga. Dejar que repose durante 10 minutos, colar y beber la infusión. Se recomienda beber tres tazas al día para ayudar a la circulación de la sangre.
5. MANZANILLA
Al igual que la ortiga, el aceite de manzanilla tiene propiedades antinflamatorias que puede ayudar a aliviar el dolor de huesos, tal y como afirma esta investigación realizada por la Universidad de Camagüey (Cuba). Aplícalo mediante masajes con movimientos que ayuden a la circulación.
Estos remedios naturales pueden aliviar las molestias, pero te recomendamos acudir al médico especialista para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuado.