Esta afección nasal se produce al inhalar sustancias que desencadenan alergias, como el polvo, el polen y algunos productos químicos. En este caso se habla de rinitis alérgica. Pero, también puede surgir como reacción a los ambientes fríos o por el consumo de alimentos que provocan intolerancias. En ese caso se trata de rinitis no alérgica.
Remedios naturales para tratar la rinitis
La cúrcuma es una especia con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que ayudan a controlar los síntomas de la rinitis. Además, bloquea la producción de inmunoglobulina E, una sustancia a la que se le atribuyen las reacciones alérgicas.
¿Cómo utilizarla? Puedes incluir cúrcuma en tus platos favoritos. También puedes tomarlo como infusión: una cucharadita de cúrcuma en agua caliente, hasta 2 veces al día.
El jengibre es una raíz natural con propiedades antiinflamatoris. Ayuda a aliviar la congestión e irritación ocasionada por la rinitis. El gingerol, su principio activo, disminuye las secreciones nasales y los continuos estornudos.
¿Cómo utilizarlo? Primero, agrega una cucharadita de la raíz rallada en agua caliente Deja reposar y consume hasta 2 veces al día. También puedes incorporar jengibre en tus batidos y bebidas naturales.
El ajo contiene un antihistamínico natural que ayuda a reducir la rinitis alérgica de forma significativa. Además, contiene un compuesto de azufre que ejerce efectos antibióticos y antiinflamatorios.
¿Cómo utilizarlo? Consume un diente de ajo triturado en ayunas. También puedes incluir ajo en polvo en ensaladas y sopas. Otra opción es preparar té de ajo: Infusiona un diente triturado y endulza con miel.
El vinagre de manzana cuenta con propiedades antibióticas y antihistamínicas que reducen la intensidad de la congestión nasal y los dolores de cabeza. Además, sus nutrientes esenciales mejoran la respuesta inmunitaria contra los agentes que desencadenan la alergia.
¿Cómo utilizarlo? Incorpora una cucharada de vinagre de manzana en un vaso de agua tibia. Consume esta bebida 2 o 3 veces al día, hasta controlar la alergia.
La ortiga es una de las plantas con propiedades antiinflamatorias que se utiliza para el tratamiento de la rinitis alérgica y otras afecciones estacionarias. Su acción antihistamínica bloquea los agentes que desencadenan esta respuesta inmunitaria. Además, proporciona un rápido alivio de la congestión, los estornudos y la comezón.
¿Cómo utilizarla? Prepara una infusión con una cucharada de las hojas secas de la planta y, si gustas, endúlzala con un poco de miel. Consúmela 2 o 3 veces al día hasta que los síntomas desaparezcan por completo. Este remedio no es apto para mujeres embarazadas ni niños pequeños.
El té verde es uno de los complementos naturales que pueden ayudar a frenar las reacciones causadas por la rinitis. Cuenta con sustancias antihistamínicas y antiinflamatorias que calman la congestión, la irritación nasal y el exceso de secreciones mucosas.
¿Cómo utilizarlo? Primero, pon una cucharada de té verde en agua caliente Déjalo reposar hasta que se concentre bien. Consúmelo hasta 2 veces al día. También puedes ingerirlo en extractos o comprimidos.
La raíz de regaliz ayuda a controlar las molestias de la rinitis por sus propiedades antiinflamatorias y calmantes. También tiene cualidades expectorantes y antivirales.
¿Cómo utilizarla? Prepara una infusión y bébela 2 o 3 veces al día. También se puede masticar su raíz.