El director del Régimen Penitenciario de Bolivia, Juan Carlos Limpias, reconoció que “hay reos que viven de la extorsión” en distintas cárceles del país. Ante ello, señaló que en los últimos años se realizaron más de 250 traslados de reos entre cárceles de distintos departamentos para desarticular los grupos de poder y evitar extorsiones o corrupción dentro de los recintos penitenciarios del país.
Agregó que parte de estos traslados fueron porque se identificaron casos de corrupción o extorsión después de recibir denuncias anónimas. Así lo indica el reporte de Unitel.
“Hemos sancionado a delegados y a reos que estaban extorsionando dentro de las cárceles. Lastimosamente hay privados de libertad que viven de la extorsión y a ellos los hemos reclasificado”, insistió.
Hasta Unitel llegaron denuncias de familiares de reos para asegurar que dentro de los recintos penitenciarios les cobran entre 1.000 y 1.500 dólares por distintos conceptos.
Respecto a las denuncias, Limpias aseguró que todos los casos fueron resueltos.
Según el informe de Régimen Penitenciario, entre el 2022 y 2023 disminuyeron las fugas en las cárceles, pasaron de 40 a 22.
LOS TRASLADAN A OTRAS CÁRCELES
Agregó que uno de los trasladados fue un reo acusado de planificar un secuestro en el Chapare, el sujeto fue llevado de la cárcel de El Abra en Cochabamba a Chonchocoro, La Paz.
“No tenemos ahora grupos (de poder), pero tenemos privados de libertad que hemos tenido del PCC (Primer Comando de la Capital), de Comando Vermelho, para aislarlos y evitar que se registren delitos dentro de las cárceles”, sostuvo.
Finalmente, la autoridad detalló que en los últimos años 60 policías que brindaban sus servicios dentro de recintos penitenciarios fueron apartados de sus funciones y a muchos se les inició procesos porque se los acusó de colaborar con los reos. Se espera que nuevos casos sean atendidos y se erradique esta situación. Agencias
