Cochabamba redujo a casi la mitad la cantidad de respiradores destinados para atención de pacientes con coronavirus, pese a que estos equipos son indispensables para la atención en camas de terapia intensiva.
Desde hace tres semanas, 6 de los respiradores del Hospital del Sur dejaron de ser usados, ya que estos comenzaron a presentar algunas fallas, como la obstrucción de sus conductos impidiendo la normal circulación del aire a los pulmones de los pacientes.
“Solamente estamos con dos máquinas que son de la institución, y las demás máquinas las hemos dejado de utilizar por las fallas que han presentado”, resaltó Alfredo Mendoza, director del Hospital del Norte.
Por ello, en este nosocomio solo se tiene espacio para cinco personas en terapia intensiva, dos de ellos que están entubados a los respiradores artificiales, mientras que los otros tres pacientes usan máscaras de alto flujo de oxígeno que suplen a los respiradores; quedando dos camas de terapia intensiva sin utilizar por falta de estos equipos, indicó Mendoza.
Sin embargo, este no es el único hospital centinela que sufre esta situación, puesto que el Solomón Klein también tiene dos de estos respiradores que dejaron de usarlos por los problemas que generaban a los pacientes.
A la fecha los directores de ambos nosocomios están a la espera de que el Servicio Departamental de Salud recoja estos equipos y pueda sustituirlos por otros.
EN ALMACENES
El pasado 10 de junio, el Ministerio de Salud entregó 10 respiradores y 10 camas de terapia intensiva, para que sean repartidos entre los hospitales centinela para ampliar la atención de pacientes críticos de Covid-19. Pero estos equipos continúan almacenados.
El delegado ministerial, Gonzalo Vargas, indicó a Unitel, que estos equipos aún no fueron entregados porque se está cumpliendo con los pasos administrativos para que sea el Sedes quien reparta de forma “equitativa” los respiradores, monitores y otros equipos que destinó para el departamento.