El exministro de Gobierno y precandidato del Movimiento Al Socialismo (MAS) a la Gobernación de Santa Cruz, Carlos Romero, aseguró este domingo que en los últimos días trató de comunicarse con el expresidente y líder de su partido, Evo Morales, pero que éste no le contesta las llamadas.
“Yo le he llamado por teléfono varias veces y no me contesta el teléfono. Me manda un mensaje con su secretaria diciendo que está en algunos trámites personales y que no sé qué y que me va a devolver la llamada pero de eso hace dos días”, aseguró Romero al portal Detrás de la Verdad.
El exfuncionario de Estado está entre los postulantes del partido azul que aspiran ser el candidato a la gobernación cruceña. Entre sus rivales están el exalcalde de Warnes, Mario Cronenbold; el presentador de televisión, Pedro García y el profesor Jhonny Morató.
Romero participó el pasado domingo 13 de diciembre en el ampliado del MAS en Lauca Ñ (Chapare) donde Morales proclamó a García como el candidato oficial del MAS por la gobernación de Santa Cruz. Pero lo que más llamó la atención en la jornada fue que los asistentes, molestos, empezaron a arrojar las sillas de plástico al escenario y una de ellas impactó en la cabeza de Evo Morales.
El hecho fue descalificado por la dirigencia del MAS y Morales acusó de que “infiltrados de la derecha” buscan dividir a su partido.
“Quien falte el respeto a Evo Morales le está faltando el respeto al trópico de Cochabamba que es el núcleo vanguardista de este proceso. Hablamos de los militantes del MAS, evidentemente”, dijo Romero.
Asimismo aseguró que para esa reunión García trasladó en buses hasta Lauca Ñ a varias personas para tener el respaldo necesario frente a Evo Morales. “Cuando la gente va espontáneamente se va en un transporte público y luego en un mototaxi hasta el lugar del evento”.
Romero insiste en desafiar a los otros precandidatos del MAS a la Gobernación cruceña, en especial a Mario Cronenbold y Pedro García a debatir sobre los “sillazos”, qué significa Evo Morales en la historia del MAS y en su proyección y si están de acuerdo o no con intentos de mercantilización de la política del MAS.
Este último punto es a propósito, según Romero, de que en las últimas elecciones nacionales del 18 de octubre, hubo gente que “ha pagado para obtener una candidatura”.
La semana pasada, García descartó por completo asistir a un debate con Romero o con cualquier otro precandidato del MAS ya que no tendría sentido. “No nos vamos a convencer este convencidos”, dijo. Agencias