La mañana de este martes, integrantes de la Federación Agropecuaria Provincial de Comunidades Interculturales de Caranavi (Fapci-Car) rompieron la cuarentena decretada por el Gobierno y marcharon para exigir, entre otras cosas, la realización de elecciones, la abrogación del decreto que permite experimentar para el uso de transgénicos y el equipamiento para el hospital de esa región.
La marcha recorrió las principales calles de la comunidad y llegó hasta la plaza principal del lugar. Ahí, lo manifestantes aprobaron un voto resolutivo que también determinó pedir la flexibilización de la cuarentena, una investigación por el ‘caso respiradores’, flexibilizar los permisos para la comercialización de productos y el abastecimiento de combustible.
EL GOBIERNO ANUNCIA PROCESOS
Al respecto, el ministro de Obras Públicas, Iván Arias, anunció el martes que iniciará acciones penales contra dirigentes de la Federación Agropecuaria Provincial de Comunidades Interculturales de Caranavi, por “atentar contra la salud de la población de ese municipio”.
«La situación de Caranavi es alarmante. Yo voy a hablar con la Fiscalía, con el Ministerio de Justicia, voy a tomar medidas porque es inaudito lo que ocurre. A nosotros nos preocupa la vida y vienen estos dirigentes a armar movilizaciones», señaló Arias en radio Panamericana.
En su condición de delegado presidencial para la lucha contra el coronavirus en La Paz, Arias sostuvo que los municipios de los Yungas no cuentan con las condiciones adecuadas para enfrentar la propagación de la pandemia, por lo que se deben asumir medidas preventivas estrictas. «Tenemos que tener el mayor de los cuidados posibles, pero no, aquí priman los intereses políticos y prima la presión porque los que marchan son gente obligada bajo sanción. Estos dirigentes están pensando más en su interés político antes que la salud de su pueblo, esto es totalmente criminal», manifestó.
Recordó que el pasado sábado 39 profesionales de salud, entre médicos, enfermeras y técnicos, retornaron a Caranavi tras ser replegados por falta de seguridad y garantías, luego de ser hostigados por algunos pobladores.
«Hace una semana y media un grupo de personas desadaptadas señalaron que no había coronavirus y que los datos del Instituto Nacional de Laboratorios de Salud eran falsos (…) Después de una semana el pueblo de Caranavi mediante sus instituciones, autoridades nos piden que los médicos vuelvan y así fue. El pueblo los recibió con la tricolor y banderas blancas agradeciendo y aplaudiendo el retorno de los médicos», contó la autoridad.
El reciente informe del Servicio Departamental de Salud (SEDES) de La Paz indica que en Caranavi hay tres infectados con COVID-19. «¿Quieren elecciones? Pues bien, ya lo ha planteado el Parlamento, la demanda ya está en el Tribunal Supremo Electoral. Habrá elecciones pero no me pongan en peligro la salud de la gente. A mí no me interesa la política partidaria. Yo trabajo por el bienestar del pueblo», manifestó. Agencias