Ronaldo contó anécdotas sobre su carrera, como que el propio Romario obligaba a los jóvenes a limpiarle las botas y traerle cafés. Además desveló que su compatriota Romario de Souza le llevó de fiesta durante la concentración de la Copa América 1997 para cansarlo y quitarle el puesto.
«En Estados Unidos 94 no jugué ningún minuto, pero aprendí mucho de José Roberto Gama ‘Bebeto’ y Romario, fueron una inspiración para mí», afirmó el actual presidente del Valladolid.
«Romario era un hijo de puta porque hacía a los jóvenes llevarle el café y limpiarle las botas», añadió con su habitual tono distendido. «Romario me dijo un día de repente: ‘Prepárate que esta noche salimos, vente conmigo y no te preocupes…’ Había preparado una escalera para saltar el muro del hotel y enseguida tenía un taxi. Volvimos a las cinco de la mañana y en el entrenamiento estaba muerto. Entendí que Romario estaba tratando de cansarme para quitarme el sitio», dijo.