La coca, entrega oxígeno mejorado a tejidos del organismo humano, es rica en vitaminas (A, B1, B2, B3, C y E), y minerales (calcio, fósforo, hierro, sodio o potacio), regula la presión arterial y mejora la oxigenación de la sangre y el cerebro.
Se desvela una explicación a la resistencia, o inmunidad al contagio del Covid-19, por parte de las personas que mantienen la ancestral costumbre del chacchado o masticar coca, para sentir sensaciones de plenitud gástrica por que combate el hambre, particularmente la coca como un alcaloide, entrega oxígeno mejorado a los tejidos del organismo humano y aumente la circulación sanguínea.
La hoja sagrada de los incas, es un producto infaltable en los principales eventos andinos, masticar las hojas de coca, acompañado de cal que lo llevan bien guardado en los isko purus y la “picsha”, es todo una tradición histórica, que ahora es un aliado para derrotar el Covid-19.
500 años de resistencia andina y el consumo de la hoja sagrada es todo un ritual en los andes, «con esta coca no nos entra ni la bala» dicen nuestros hermanos campesinos, se sienten inmunes ante este mortal virus y casi no se conoce el nombre de fallecidos por la pandemia que hayan sido consumidores de la hoja de coca, salvo excepciones.
Los expertos afirman entre otras ventajas que reporta el chacchado de coca, es el permitir aumentar la potencia del corazón y bombea con mayor fuerza permitiendo dilatar las arterias, además de contener vitaminas, proteínas, grasas hidratos de carbono y el complejo vitamínico B1 y B2.
De lo expuesto acerca de esta costumbre ancestral que se inició entre agricultores y mineros, luego se extendió a otras actividades laborales y profesionales, esas personas que realizan el chacchado hoy, están protegidas de la virulencia del Covid-19, que arrebata millones de vidas.