La FIFA desbloqueó un fondo de ayuda para sus federaciones de 1.500 millones de dólares en forma de subvenciones y préstamos, anunció su presidente Gianni Infantino que ya se popularizó como el nuevo “Plan Marshal”, en relación al desembolso de Estados Unidos para Europa Occidental tras el final de la Segunda Guerra Mundial.
“La FIFA aprobó por unanimidad un plan de ayuda de 1.500 millones de dólares”, declaró Infantino, al término de una reunión del Consejo, precisando que el organismo ejercerá “un control estricto de la utilización de los fondos”. El pago anticipado de una cantidad de 150 millones de dólares a las federaciones había sido ya anunciado en abril. Cada una de las 211 federaciones miembro podrá recibir un millón de dólares y una ayuda suplementaria de 500.000 dólares podrá ser concedida para acudir en ayuda del fútbol femenino. Otra ayuda estará disponible en forma de préstamos sin intereses, que podrán alcanzar hasta el 35% de ingresos de cada federación. La cantidad mínima de cada préstamo será de 500.000 dólares y el máximo de 5 millones de dólares. Además, cada confederación podrá recibir un préstamo de 4 millones de dólares.
Para financiar esas ayudas, la FIFA recurrirá a sus reservas, a saber 328 millones de dólares para cubrir las subvenciones directas y 556 millones para financiar los préstamos, precisó Infantino. “Clubes y federaciones están en peligro real. En algunas partes del mundo, el fútbol no ha regresado todavía. Debemos acudir en su ayuda”, añadió.