La polémica quedó abierta tras la resolución por las y los seis parlamentarios que fueron expulsados de las filas del Movimiento Al Socialismo (MAS), durante el ampliado departamental que se desarrolló el fin de semana pasado, calificaron de ilegal y como violencia política el accionar de algunos miembros del partido azul, a quienes calificaron de llunkus.
«Un ampliado no tiene competencia, ni jurisdicción, ni atribución para expulsar a un parlamentario por aprobar una ley. Además, las y los diputados que estamos aquí somos los que más trabajamos y vamos a seguir en esa línea», sostuvo Magaly Gómez.
Asimismo, señalaron que continúan siendo del MAS y asistirán a todas las convocatorias que realice el instrumento político.
Por su parte, la diputada Olivia Guachalla sostuvo que la intención es dividir aún más al partido en función de Gobierno y desestabilizar la gestión del presidente Luis Arce. Además, señaló que ellos no fueron nombrados a dedo, ni tampoco huyeron del país durante los conflictos de 2019.
«Nosotros venimos de las bases, no somos allegados a un dirigente, y no vamos a permitir que unos cuantos llunkus destruyan lo que hemos construido», reclamó Guachalla.
Los seis diputados cochabambinos denominados como «renovadores» que fueron expulsados por el ala evista del Movimiento Al Socialismo (MAS) por aprobar la Ley del Censo, entre otras cosas, dieron la cara este lunes y rechazaron dicha medida, pues aseguran que la medida del radicalismo no es legal.
En conferencia de prensa, Magaly Gómez y Olivia Guachalla, dieron a conocer su disconformidad con la resolución. Cabe recordar que el partido azul tomó la determinación en un ampliado departamental que se llevó adelante en la Llajta.
“A nosotros nos ha costado sangre, luto, vidas construir el MAS, y no vamos a permitir que unos cuatro llunkus y chupamedias quieran ahora cuestionar nuestro trabajo”, advirtió Guachalla, en tono molesto.
JUSTIFICACIÓN
El diputado Héctor Arce explicó las razones por las que fueron expulsados seis diputados del MAS.
Primero, por haber apoyado la Ley del Censo, sobre la cual se habría establecido un lineamiento.
Segundo, haber pasado por encima al recibir nombramientos para presidir el comité de manera directa y sin el aval de los “niveles superiores”.