Según datos de la ONU, cerca de 100.000 huyeron de sus hogares, algunos con destino a otras ciudades del interior del país y otros a países limítrofes. Al menos 157 ucranianos murieron en el primer día de la invasión rusa. El Gobierno ucraniano ha instado a la población a donar sangre y a buscar atención médica fuera de los hospitales si su estado de salud se lo permite.
“157 héroes, nuestros ciudadanos”, perdieron la vida, afirmó Zelensky en un video publicado en la página web del gobierno, agregando que otros 316 ucranianos resultaron heridos durante los enfrentamientos.
El Kremlin lanzó hoy una “operación militar especial” en Ucrania desde todos los flancos, el este, el norte y el sur, y ya se acerca a la capital, Kiev. Las Fuerzas Armadas de Rusia emplearon armas de alta precisión contra infraestructuras militares, baterías antiaéreas y bases aéreas militares, y aunque el Ministerio de Defensa aseguró que no atacan ciudades ni civiles, al menos cuatro ciudadanos murieron hoy en un ataque perpetrado por la artillería de las milicias separatistas prorrusas contra un hospital en la región de Donetsk, según las autoridades locales.
Las tropas rusas se apoderaron de una base aérea estratégica cerca de Kiev, así como de la zona de la central de Chernóbil, contaminada aún por la radiactividad del accidente nuclear de 1986, cuando Ucrania era parte de la hoy desmembrada Unión Soviética. La base aérea de Gostomel cayó tras un ataque llevado a cabo por soldados llegados en helicóptero desde Bielorrusia, un país aliado de Rusia, reportaron testigos.
¿La Tercera Guerra Mundial?
Varios líderes mundiales habían advertido desde semanas e incluso meses del peligro que significa la intención de Vladimir Putin de intentar cambiar el actual orden mundial. El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha calificado lo que sucede con su país como el principio de una confrontación global.
El mandarario ucraniano, luego de la operación militar rusa, conversó con gobernantes de Estados Unidos, Reino Unido y Alemania a los que pidió que el «mundo debe obligar a Rusia a la paz». Por su parte Rusia, está en estrecho contacto con su aliado Bielorrusia. Mientras que China, que es un socio estratégico en Moscú, optó por un ejercicio de neutralidad diplomática.
Lo concreto es que el mismo presidente estadounidense Joe Biden recalcó que solo «habría una guerra mundial si los estadounidenses y los rusos empiezan a dispararse unos a otros». Por el momento parece que una confrontación entre estadounidenses y rusos está descartada ya que el mismo Biden ha descartado que envíe tropas norteamericanas a suelo ucraniano, eso sí ha aclarado que se defenderá cada milímetro de territorio de la OTAN.
La experta en temas internacionales, Inés Capdevila, escribió en un artículo en La Nación de Argentina que «para convertirse en una verdadera guerra mundial debería intervenir la otra superpotencia actual, China», lo que no parece muy posible.
«Una guerra global atentaría contra la economía china y contra dos de sus principales socios comerciales, Estados Unidos y la Unión Europea (UE). Xi necesita una economía robusta para mantener la calma dentro de China y afianzar su proyecto de poder», añade Capdevila.
4 PUNTOS PARA ENTENDER RUSIA VS UCRANIA
PUNTO 1
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, anunció este jueves una «operación militar especial» en la región del Donbás, en el este de Ucrania. Según explicó, la decisión fue tomada después de recibir una petición de ayuda de los líderes de los territorios separatistas respaldados por Rusia formados en el este de Ucrania en 2014, aunque desde hace semanas la inteligencia occidental había alertado de una potencial invasión.
«Tomé la decisión de llevar a cabo una operación militar especial. Su objetivo será defender a las personas que durante ocho años sufren persecución y genocidio por parte del régimen de Kiev», señaló el presidente ruso, en una afirmación para la que no ha presentado evidencias.
PUNTO 2
Poco antes del anuncio de Putin y del inicio de la operación militar, el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, realizó un emotivo discurso en televisión. El líder de Ucrania subrayó que su país está listo para un ataque ruso y advirtió: «No necesitamos ninguna guerra, ni fría, ni caliente, ni híbrida. Pero si las tropas nos atacan, si intentan tomar nuestro país -nuestra libertad, nuestras vidas, las vidas de nuestros hijos-, nos defenderemos». «Si nos atacan, verán nuestras caras, no nuestras espaldas», dijo el presidente ucraniano.
PUNTO 3
Putin afirmó que Ucrania no tenía antecedentes de ser una nación real y acusó, a las autoridades ucranianas de corrupción. Poco después del anuncio, Putin firmó una orden para que las tropas realizarían «funciones de mantenimiento de la paz» en ambas regiones rebeldes. «Permítanme enfatizar una vez más que Ucrania para nosotros no es solo un país vecino. Es una parte integral de nuestra propia historia, cultura, espacio espiritual», dijo. Putin afirma además, sin pruebas, que existe un «genocidio» de Ucrania contra los rusoparlantes del este del país.
PUNTO 4
Los antecedentes hay que encontrarlos en 2014, cuando Rusia tomó el control de Crimea y apoyó a las fuerzas separatistas en el este de Ucrania. Los grupos rebeldes crearon repúblicas populares en Donetsk y Luhansk. El conflicto se ha cobrado hasta ahora unas 14.000 vidas. El 18 de febrero pasado, el servicio ucraniano de la BBC informó que la artillería pesada y los morteros disparados en la región fueron los más pesados en años. En su último informe, los monitores internacionales de la Organización para la Seguridad y la Cooperación de Europa informaron de cientos de violaciones del alto al fuego entre el 17 y el 18 de febrero.
En noviembre del año pasado Rusia empezó a desplegar grandes cantidades de tropas en áreas cercanas a la frontera con Ucrania. Pero el 15 de febrero Putin sugirió que habría una retirada parcial de las fuerzas rusas. Sin embargo, Ucrania y sus aliados dijeron que no hubo una reducción en el número de tropas rusas en las zonas fronterizas.
«Siempre han desplegado fuerzas de un lado a otro», dijo el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, un día después del anuncio de Rusia. Agencias