Una torrencial lluvia, que empezó a caer durante la noche del jueves y que se prolongó hasta la madrugada de este viernes, generó una serie de casos de emergencia en al menos cuatro municipios de Cochabamba.
Según reportes de medios locales, los municipios más afectados, hasta el momento, son Tiquipaya, Quillacollo, Colcapirhua y hasta la propia ciudad de Cochabamba.
En distintos sectores de las poblaciones afectadas, una serie de viviendas, calles y avenidas quedaron completamente anegadas.
EL INICIO
Poco antes de las 10 de la noche, una lluvia leve comenzó a caer en los municipios de Tiquipaya Colcapirhua y También la parte oeste de Cercado. La intensidad hasta entonces era regular y por tanto era tomada como una lluvia pasajera.
Con el paso de los minutos, la intensidad se hizo más fuerte y por tanto, también empezó a generar mayor acumulación de agua. Los rayos y truenos resonaban en el cielo mientras que, poco a poco, el agua caía por montones, iniciando de este modo los problemas.
Cerca de la media noche, siendo ya viernes, varias casas en la zona norte de estos municipios empezaron a sentir los efectos. Poco a poco los vecinos despertaban en los barrios alarmados por la situación, y estando fuera de sus hogares cayeron en cuenta de lo inevitable.
En la zona de Tiquipaya, las calles se convirtieron en ríos, tal y como sucedió a inicios de este mes, el agua se desbordó de los desagües y empezó a recorrer las calles arrastrando toda clase de objetos que encontraba a su paso.
Las paralelas también fueron afectadas, poco a poco el agua ingresaba a los domicilios donde las personas, con todo lo que tenían a disposición, trataron de sacar el agua que ya se había vuelto incontrolable.
Vanos fueron los esfuerzos de todos los habitantes, por lo que la mejor opción, fue la de sacar cualquier objeto de valor fuera del alcance del agua, que ya no era solamente agua, si no que contenía también lodo y sedimento entremezclado.
En Colcapirhua la situación era similar, pues todas las casas al norte que se encontraban cerca de los ríos y torrenteras terminaron afectadas, pero en un menor grado.
La fuerza del agua arrastró ramas y basura que había sido tirada, y que en consecuencia, también hizo un tapón que hasta cierto punto dificultó el paso de la riada.
En Cercado, desde la media noche solicitaron auxilio las casas en el norte que se encontraban cerca del caudal del río Rocha y otros afluentes, ya que el agua había ingresado repentinamente y ponía en riesgo la vida de menores y ancianos.
Los equipos de emergencia trabajaron por varios días tratando de colaborar a todos los sectores posibles, de modo que pueda evitarse un daño mayor al que se vio cuando llegó la madrugada.
LAS TERRIBLES PÉRDIDAS
Casas derrumbadas y otras llenas de sedimento fueron los daños que se vieron al día siguiente de la torrencial lluvia.
Gran cantidad de hogares terminaron afectados en los tres municipios que están más cerca de las riadas: Tiquipaya, Colcapirhua y Cercado.
Familias enteras perdieron sus animales, entre gatos, perros, aves de corral como ovejas o patos e incluso la pérdida de vidas humanas.
En Tiquipaya, casas que tenían al interior sembradíos de vegetales y hortalizas también perdieron todo y acabaron con lodo dentro de sus viviendas.
Varias estructuras cedieron por las aguas y con ellas, también se perdieron objetos de valor. Personas perdieron su hogar y se quedaron en la nada, a la espera de una respuesta por parte de las autoridades.
La rabia e impotencia podía sentirse en la voz de quienes resultaron afectados y que, pese a todo, deben seguir trabajando para recuperar al menos un poco de lo perdido. Muchos de ellos no cuentan con los recursos para reconstruir sus viviendas y deberán abandonarlas momentáneamente hasta encontrar una solución.
ACUSAN A LAS ALCALDÍAS
En medio de la molestia por las pérdidas, los vecinos en cada municipio responsabilizan a las alcaldías por esta situación, ya que consideran que la inacción aún sabiendo que esta problemática existe hace varios años atrás, ocasionó este grave daño que muy difícilmente podrían entender las autoridades al no estar en la misma situación.
Lamentan que las alcaldías esperen a que hayan terribles consecuencias para recién inicar acciones y tratar de subsanar el daño que ya está hecho.
En el caso de quienes perdieron su casa en la riada, acusan a la alcaldía de haber obstaculizado construcciones que querían hacer para evitar las inundaciones.
En la zona del Cruce Taquiña, los vecinos bloquearon la calle reclamando a la alcaldía que reponga la rotonda que quitaron en días pasados, puesto que a causa de ese trabajo, las aguas habrían ingresado con mayor facilidad a su zona.
Todos los vecinos, en los tres municipios afectados, aguardan soluciones por parte de las autoridades que eligieron para resguardar su integridad en este tipo de situaciones que se repiten en esta gestión.