Fue traicionado por la persona que menos esperaba, un empresario Alvarado de 43 años, padre de tres hijos, fundó su empresa del rubro de la construcción y contrató como secretaria a su amiga Emily Gonzales de 26 años, a quien conocía de un trabajo anterior, sin imaginar que ella e integrantes de una banda que lo secuestrarían para robarle sus vehiculos y retirar su dinero de sus tarjetas bancarias.
El empresario fue visto por última vez a las 10:30 de la mañana del lunes cuando salió de una fábrica del Cercado tras una inspección en su vehículo.
Esa noche y el martes el celular de López estaba apagado. Lo prendían por ratos. El miércoles su señora Teresa Pérez dijo que iba a denunciar el caso. “Al rato le llegó un mensaje donde le decían ‘no hagas denuncia, estoy bien, si denuncian me puede pasar algo. Dame 15 días para solucionar el problema’. Al parecer, se hicieron pasar por él para despistarnos y no poner la denuncia”, acotó el pariente. El jueves se hizo la denuncia en la comisaría de Cieneguilla, distrito en el que vivía.
La noche del jueves, policías especializados en secuestros intervinieron a un hombre cuando manejaba el vehículo de López. Ese fue el primer paso para esclarecer el caso pues, según fuentes policiales, el sujeto delató a Emily, a quien conocía del colegio porque viven en la misma zona.
La madrugada del viernes, la policía intervino a la mujer. Ella dijo que el lunes fueron a tomar a una playa y lo arrojaron a un basural cercano de la costa después de ser torturado y asesinado brutalmente para robarle todo su dinero de sus cuentas bancarias.
Tras los interrogatorios la mujer confeso la dirección exacta del cuerpo, donde la Policía encontró el cadáver en estado de descomposición. Los familiares lo reconocieron por la ropa que llevaba puesta el día que desapareció. El empresario habría muerto tras recibir varios golpes en todo el cuerpo y después por una sobredosis después de ser pepeado. Agencias