Un grupo de 11 senadores republicanos anunció este sábado que se opondrá a la certificación que el Congreso debe hacer del resultado de las elecciones en Estados Unidos, una decisión que podría retrasar la confirmación de la victoria de Joe Biden, aunque no impedirla.
Hasta ahora, solo un senador, Josh Hawley, había manifestado su intención de cuestionar formalmente el triunfo del demócrata el miércoles, un acto inusual que amenaza con exponer las tensiones dentro del Partido Republicano.
«El Congreso debería nombrar inmediatamente una comisión electoral, con plena autoridad para investigar» un posible «fraude electoral», dijeron en un comunicado siete senadores en funciones y cuatro recién electos, haciéndose eco de las acusaciones que el presidente saliente, Donald Trump, ha lanzado durante casi dos meses sin mostrar pruebas.
Esta comisión «realizará una auditoría de emergencia de 10 días sobre los resultados en los estados».