Stefany Aguilar inició su carrera musical cuando solo tenía 10 años desde entonces hasta la actualidad ha ido cosechando éxitos que incluso la llevaron fuera del país hasta el viejo continente representado el folclor nacional.
Esta cochabambina de sepa nació en “cuna músical”, pues su padre también dedicó su vida a los escenarios, fue fundador del grupo Kansas, una agrupación de salsa, cumbia y disco de los años 80.
El giro musical lo hicieron gracias a su hermano mayor, que disfrutaba más del huayño, la cumbia sureña y la tunantada, por lo que deciden adoptar estos ritmos para la agrupación, haciendo algunas variaciones Stefany incursiona en la “cumbia huayño” que tanta acogida tiene en la Llajta.
No obstante, el canto no es su único don, pues también toca el teclado y la batería y es precisamente así que incursionó en los escenarios, ya que formaba parte de la agrupación electrónica de su padre.
MIEDO A LAS BURLAS
Stefany contó a LA VOZ que empezó a cantar porque las cholitas que formaban parte del grupo no se dedicaban al 100% a la música, por lo que ella asume ser la vocalista y graban su primer disco que es muy bien aceptado por quienes gustan de este tipo de música.
Sin embargo, no todo era el lanzamiento del albun, Stefany tenía que empezar con las presentaciones en vivo, para ello, su hermano le dijo que debía vestir la pollera, en un inicio ella se negó por miedo a la burla de sus compañeros del colegio. Después de conversar con su familia se dio cuenta que no tenía nada que temer ya que llevar la pollera es un orgullo.
“Yo no me avergüenzo de la pollera, mi abuelita la usaba, pero tuvo que sacársela para viajar a Argentina, antes no estaba valorizada como ahora”, contó.
Pese a la seguridad que demostró en sus primeras presentaciones, fue el blanco de burlas de sus compañeros de colegio que incluso la llegaron a insultar le hicieron la vida imposible antes de graduarse como bachiller, pero ella encontró apoyo en su familia y algunos de sus amigos.
Stefany se siente orgullosa de la música y la ropa que caracteriza al grupo y afirmó que muchas jovencitas empezaron a usar pollera y en las horas cívicas de los colegios tocaban sus canciones, lo cual demostró y demuestra que hay un cambio de mentalidad y los prejuicios van desapareciendo.
SIEMPRE EN FAMILIA
Stefany tiene muy arraigadas sus raíces familiares puesto que desde que inició en la música lo hizo junto a ellos, su padre y hermanos siempre estuvieron presentes y son quienes la ayudan y cuidan hasta el momento.
Sus hermanos sienten la misma pasión, por ello, forman parte de la agrupación, el mayor es compositor y el menor es baterista.
“Mi papá trabaja conmigo desde siempre, el sigue siendo mi mano derecha, la cabeza. Yo como artista puedo estar bien, pero como persona necesito que me sigan viendo y acompañando”, sostuvo.
Recordó con cariño su niñez y señaló que siempre tuvo la imagen de una familia unida, pues sus padres siempre estuvieron juntos luchando para salir adelante; sin bien, pasaron necesidades económicas, las supieron sobrellevar y en su mesa nunca faltó el alimento.
Ahora Stefany formó su familia, está casada y tiene un bebé de un año y medio, comparten la casa con sus papás y continúan ayudándose unos a otros.
Giras por el mundo
La agrupación Stefany Aguilar va cosechando éxito no solo en el país, sino también en el exterior, es así, que ha visitado Perú, Brasil, Argentina, Estados Unidos y llegó hasta Europa con el huayño cumbia.
“Una de mis mejores experiencias fue conocer EE.UU. estuve 20 días de gira y mi agenda era llena porque siempre recibía alguna invitación, íbamos a diferentes eventos; todos parecían una fiesta de cumpleaños, siempre nos daban regalos”, contó.
Una de sus mayores proyecciones es formar su grupo que toque baladas, cumbias y reguetón; no obstante, aseguró que continuará haciendo cumbia huayño para quienes gusten de este ritmo.
Los artistas a los que más admira y son su inspiración son Marco Antonio Solís, Laura Pausini y la agrupación los Kjarkas. (Priscila Pinell)