El sindicado fue a recogerla para ir a una fiesta, se dirigieron rumbo al domicilio de la cumpleañera, pero en el trayecto el sujeto le dijo a la víctima que tenía que ir a su casa porque su madre le había enviado un mensaje para que retorne por una emergencia.
Una vez adentro, la víctima se percató de que no había nadie y éste simplemente le dijo que era hora de que ella le pagara por todo lo que le hizo.
El sujeto le agarró bruscamente de los brazos, le tiró hacia la cama, le bajó el pantalón, le quitó la ropa interior. Sin embargo, la víctima intentó defenderse golpeándolo con un florero que estaba cerca y rasguñándole en el cuello.
La joven comenzó a gritar pidiendo auxilio y pateaba como podía al sujeto para que no la agrediera sexualmente. Ella aprovechó para vestirse lo que podía y seguir pidiendo por ayuda. Cuando él intentó subirse el pantalón, ella salió corriendo del domicilio.