El hecho de tránsito se registró este pasado 21 de octubre en inmediaciones de la avenida Blanco Galindo a la altura del kilómetro 11 y quedó registrado en las cámaras de seguridad, donde se ve a los motorizados circular hasta que el taxi y el camión chocan en plena vía.
“Llegue de viaje de La Paz y ese día tome un taxi de ahí, porque la floja nos dejó en la plaza Bolívar, tome el taxi y me estaba viniendo a mi casa y en el kilómetro 11…estábamos nosotros en nuestra ruta y el auto de la Pil dio una vuelta en L, no estaba en su sentido el auto, porque estaba yendo en la carretera de Cochabamba a Quillacollo, estaban pasando los autos recto y se metió directo hacia la Capitán Ustariz se metió y en ahí hubo el accidente”, recuerda Wilmer Tangara, que era pasajero en el taxi.
Como consecuencia del impacto, el joven de 22 años resultó herido y explica que después del choque los conductores estaban más preocupados por sus motorizados que por socorrerlo.
“Ellos estaban preocupados en su vehículo, yo estaba mal, toda mi cabeza estaba sangrando y parte de mi ojo estaba sangrando y en ese momento yo solo llamé a mi mamá y justamente había una ambulancia en ahí y me ayudaron, me socorrieron”, relata.
Fue evacuado a un hospital, donde su calvario empezaría, permaneció internado una semana y tuvo que salir antes debido a que los conductores no se hacían cargo de los gastos.
“Cuando me llevaron al hospital tenían que activar su Soat, pero los individuos querían que les roguemos, porque los del hospital igual nos venían a insistir todos los días”, añade.
Con la presión tuvieron que llevarlo a su casa, sus papás fueron a buscar a los conductores para que se hagan cargo y estos ofrecieron 500 Bs. a la familia.
“Le habían dicho, señora, le podemos colaborar con 500 pesos, mientras tanto para la salud de su hijo, mi mamá cuando escucho eso se molestó y le ha dicho la vida de mi hijo no cuesta 500, yo quiero que me devuelva a mi hijo tal como estaba”, explica.
La familia es de escasos recursos y se encuentran preocupados porque aún necesita cubrir los gastos de medicamentos y exámenes que necesita. “He ido al médico y me ha dicho que necesito un análisis con el oftalmólogo porque parte de mi ojo sigue rojo, sigue hinchado”, lamenta.
Lo que los familiares piden es que ambos conductores se hagan cargo de las curaciones, “hasta ahorita sigo sintiendo esas punzadas en la cabeza y parte del ojo igual hay ratos que medio que mi ojo de por sí está temblando”, finaliza.