Con el tomate todo son ventajas. Gusta a grandes y pequeños y sus beneficios para la salud son muchos. Los científicos nos recuerdan que el tomate es bueno para prevenir las enfermedades cardiovasculares, es hidratante, cuida la piel y previene el cáncer de próstata.
Muchos de sus beneficios nacen del licopeno, un antioxidante presente en esta hortaliza. El tomate, que también contiene fibra, ayuda a prevenir el cáncer de próstata ya que ese licopeno antioxidante se fija en los tejidos de la próstata y evita la presencia de células malígnas.
BENEFICIOS
El tomate es considerado una fruta a pesar de que normalmente es utilizado como un vegetal en las ensaladas y en la preparación de algunos platos culinarios.
PRÓSTATA
El tomate es rico en licopeno, un pigmento carotenoide que ejerce una potente acción antioxidante en el organismo, protegiendo las células del efecto de los radicales libres, principalmente de las células de la próstata.
Algunos estudios indican que el consumo de salsa de tomate aumenta las concentraciones de licopeno en el organismo, 2 a 3 veces más que cuando se consumió el tomate crudo o en jugo fresco.
CARDIOVASCULARES
El tomate por su elevado contenido de antioxidantes ayuda a mantener los vasos sanguíneos saludables, además de poseer fibras que ayudan a reducir los niveles de colesterol malo (LDL). Además de esto, algunos estudios han relacionado que el consumo de licopeno en la dieta ayuda a disminuir el riesgo de infarto al miocardio.
VISTA, PIEL Y CABELLO
Por ser rico en carotenoides, los cuales se transforman en vitamina A en el organismo, el consumo de tomate ayuda a mantener la salud visual y de la piel, además de fortalecer y darle brillo al cabello.
PRESIÓN ARTERIAL
El tomate es rico en potasio un mineral que ayuda a regular la presión arterial, y por ser rico en agua también crea un efecto diurético. Además de mantener la presión, evita la debilidad y los calambres musculares durante la actividad física intensa.
SISTEMA INMUNE
Gracias a su contenido de vitamina C, consumir tomates ayuda a fortalecer las defensas naturales del organismo debido a que combaten los radicales libres, que en exceso, favorecen la aparición de ciertas enfermedades.
Además de esto, la vitamina C es un excelente cicatrizante y facilita la absorción del hierro, siendo particularmente indicada en el tratamiento contra la anemia. Además de esto, la vitamina C sirve para facilitar la cicatrización de la piel y mejorar la circulación sanguínea.
CONTRADICCIONES
El tomate es uno de los alimentos desaconsejados, sin embargo, cuando se sufre de llagas o aftas en la boca, debido a su nivel de acidez. Por ejemplo, muchas personas que siguen tratamientos de quimioterapia sufren como efecto secundario mucositis, una alteración de la mucosa de la boca que produce inflamación y llagas, cuyo dolor se acentúa con los alimentos ácidos como el tomate.
Por la misma razón, las personas que padecen alteraciones en el aparato digestivo deben evitar el consumo de tomate. Así pues, si se sufre reflujo esofágico, acidez de estómago, úlceras estomacales, o se ha pasado por una cirugía digestiva, es preferible que se evite consumir este alimento en la dieta.