Tres agentes antinarcóticos de la Unidad Móvil de Patrullaje Rural (Umopar) resultaron gravemente heridos tras sufrir una violenta emboscada organizada por comunarios de la zona del trópico de Cochabamba.
El violento hecho se habría suscitado en horas de la madrugada de éste miércoles 10 de diciembre, en inmediaciones de la comunidad de Aroma, en el municipio de Villa Tunari.
De acuerdo con el reporte preliminar, la agresión ocurrió después de que los efectivos intervinieran y destruyeran al menos 10 factorías móviles de droga en el sindicato Nueva Aroma, donde además lograron aprehender a 6 personas quienes eran trasladadas en calidad de aprehendidas hasta dependencias policiales.
Sin embargo, en el camino fueron sorprendidos por una turba de comunarios, quienes los atacaron con piedras, petardos y machetes, provocándoles graves heridas en su humanidad, al igual que serios daños en los motorizados.
De acuerdo a la información que maneja esta unidad policial, los comunarios pretendían liberar a los aprehendidos. “Tras la intervención, los comunales han actuado de forma violenta, exigiendo la devolución de los precursores y también de las personas aprehendidas, han bloqueado todos los accesos con troncos, piedras, hasta la salida del lugar”, manifestó Franz Cabrera, director nacional de la FELCN.
Pese a las heridas, el informe oficial señala que los tres agentes se encuentran en estado estable, gracias a que fueron auxiliados rápidamente y llevados a bordo de un helicóptero hasta el aeropuerto El Trompillo de la ciudad de Santa Cruz.
Tras el hecho, el viceministro de Defensa Social y Sustancias Controladas, Ernesto Justiniano, advirtió que “no habrá zonas liberadas ni convivencia con el narcotráfico” en el país, remarcando que está planificado trabajar conjuntamente incluso con organizaciones internacionales como la DEA con tal de recuperar el control de dicha región del país. “En Bolivia hay miles de familias que trabajan honestamente, que no reciben dinero del narcotráfico, que no quieren fábricas en su territorio ni violencia en su nombre. Y hay estructuras criminales que intentan cambiar esto”, afirmó.
