Tropas ocupan las calles de EE.UU. tras violentas protestas por abuso policial

Miles de soldados patrullaban este domingo (31.05.2020) las principales ciudades de Estados Unidos, tras cinco noches consecutivas de protestas contra el racismo y la brutalidad policial que desembocaron en disturbios. Un total de 25 ciudades de 16 estados decretaron toque de queda nocturno y 5.000 efectivos de la Guardia Nacional fueron desplegados.

La noche del sábado fue especialmente violenta en las calles de Nueva York, Filadelfia, Dallas, Las Vegas, Seattle, Des Moines, Memphis, Los Ángeles, Atlanta, Miami, Portland, Chicago, e incluso la capital Washington. Rutas fueron cortadas, autos y comercios incendiados, mientras las fuerzas del orden, desplegadas en gran número, respondieron con gas lacrimógeno y en algunos casos con balas de goma.

Según Tim Walz, gobernador de Minnesota, epicentro de las manifestaciones, los responsables de la caótica situación podrían ser anarquistas, supremacistas blancos o narcotraficantes. El presidente Donald Trump, en cambio, acusó a la «izquierda radical” y a grupos antifascistas de encontrarse tras los desmanes. La oposición ha criticado al mandatario por «enardecer los ánimos”, tras haber calificado de «matones» a los manifestantes.

Decenas de heridos

En Washington, en tanto, unos setenta agentes del Servicio Secreto y de la Policía Metropolitana resultaron heridos durante los disturbios de la noche del sábado en las inmediaciones de la Casa Blanca. El Servicio Secreto, que se encarga de la seguridad de la mansión presidencial, confirmó que decenas de sus agentes sufrieron heridas por el lanzamiento de «proyectiles como ladrillos, piedras, botellas, petardos y otros objetos» contra ellos.

En tanto, unos 5.000 efectivos de la Guardia Nacional, un cuerpo en la reserva, han sido activados en 15 estados y en el Distrito de Columbia. Esa fuerza precisó que tiene, además, unos 2.000 efectivos preparados para sumarse a las filas. Durante los altercados de esta semana, al menos tres personas han fallecido por disparos en Indianápolis, Detroit y Oakland, de los que la policía se ha desvinculado.

La muerte de George Floyd, un ciudadano afroamericano que falleció tras una brutal detención policial, se ha convertido en el último símbolo de la violencia policial contra los negros y ha provocado la mayor ola de protestas de los últimos años en Estados Unidos. Agencias