Tuto llama a Carlos Gill «testaferro de Maduro»

El expresidente Jorge Tuto Quiroga, candidato a la presidencia para las próximas elecciones, calificó a Carlos Gill, propietario de La Razón, como un “testaferro de (Nicolás) Maduro” y anunció que expropiará sus empresas, empezando por los ferrocarriles.

“Aquí llegó un gobierno autoritario (del MAS) y mediante extorsión, exacción y presiones sabemos lo que pasó acá (…). Llegó el testaferro de Maduro, el señor (Carlos) Gill y empezaron a comprarse medios de comunicación”, dijo Quiroga al exponer en el foro organizado por la Cámara Americana de Comercio de La Paz y la Cámara de Comercio de Bolivia en EEUU.

Según Quiroga, Gill, un empresario venezolano, logró hacer negocios con el Estado a cambio de que su periódico favoreciera las políticas del gobierno anterior.

“Parte de esa permutación fue que el testaferro madurista venía, se compraba medios de comunicación, los ponía al servicio del MAS. La Razón es un pasquín al servicio del Movimiento Al Socialismo, fue adquirido por un testaferro de Maduro”, insistió.

Luego dijo que empresarios venezolanos compraron después Gravetal, Prodem y los ferrocarriles occidental y oriental del país.

Sobre estas últimas empresas, Quiroga advirtió que, si llega a ser Presidente, serán nacionalizadas. No quedó claro si esa idea de expropiar las compañías incluiría a La Razón.

“(Los ferrocarriles) tienen que pasar a manos de Bolivia. Le vamos a quitar al señor Maduro, qué chille Maduro, que chille Diosdado y que chille Evo Morales, (la empresa) está en manos de un andamiaje corrupto venezolano” sentenció el expresidente en el foro. Todos los candidatos a las elecciones presidenciales participarán del evento, uno cada día.

Quiroga insistió: “Se les va a expropiar y vamos a tener que ajustar cuentas con estos señores venezolanos, sobre todos los negocios turbios que han hecho, porque han hecho un enorme tráfico de influencias, en ventas, en contratos sin licitación (…). El ferrocarril va a pasar a manos de Bolivia, no va a quedar en manos de Maduro”.

En su criterio, el “corredor bioceánico” no se podrá realizar mientras los ferrocarriles “estén en manos de Maduro”.

Luego dijo sentirse sorprendido de que en ocho meses de gobierno, el oficialismo no hubiera investigado la situación de las empresas que mencionó.

“El tongo que hizo (Gill) de venir a comprarse medios, vender cabinas de teleférico a triple de precio y radares, conmigo no va”, señaló. La referencia la hizo en sentido de que Gill fue contratado en el gobierno anterior para hacer las obras civiles del teleférico y proveer de radares al Ministerio de Gobierno.

Gill ha negado en varias oportunidades ser propietario de Gravetal o Prodem, pero sí es propietario de una parte de las acciones de las redes oriental y occidental de los ferrocarriles bolivianos, que compró a empresas privadas de Chile y EEUU. También es propietario de La Razón, empresa que acaba de despedir a decenas de sus trabajadores, y se encargó, como ya se ha dicho, de las obras civiles del teleférico y de los radares. Se lo califica como un empresario cercano al gobierno anterior. Agencias