Velas encendidas, flores y un pequeño ataúd blanco fueron el escenario para despedir a la pequeña Ashlyn de un año y diez meses perdió la vida a manos de su padrastro. Según contó su familia, era muy tierna, alegre y querida.
La tía reveló que el acusado agredía constantemente a su hermana. «Tiene que haber justicia…el hombre lo ha matado a mi sobrina, él es el culpable de todo esto», dijo la tía entre lágrimas.
El caso está siendo seguido por el Colectivo Mujeres de Fuego, «la niña tiene hematomas en el cuello, es decir que fue asfixiada, tiene coágulos en la cara, significa que le han tapado la boca para que no se escuche su llanto. La causa de la muerte es que tiene el hígado destrozado», detalló Fátima Terrazas, representante del colectivo.
El padrastro continúa aprehendido y la pequeña fue enterrada en el cementerio de Valle hermoso.