La muerte de Aurelia conmocionó a la población de Capinota que en medio del pesar de su terrible feminicidio acompañaron a sus tres hijos y a sus familiares a darle el último adiós en el cementerio general de dicho municipio.
El cortejo fúnebre lleno de flores, el ataúd de quien se convirtió en la cuarta víctima de la violencia extrema contra las mujeres en nuestro departamento, sus hijos y familia se despidieron en medio de lágrimas antes de que su ataúd fuera enterrado.
La muerte de la madre de familia reveló las constantes agresiones que soportó por años junto a su verdugo, razón por la cual ella intentó separarse, pero no pudo.
“Cada vez dice, una vez también aquí había tumbado con puñete, había hecho llegar a la piedra y ha desmayado ahí también. Mi hermana me ha llamado, así me ha botado, me dijo. Quería separarse, el hombre no quería, quería volver siempre a mi hermana”, aseguró una familiar.
La investigación también relevó que la herida que sufrió su hijo menor ocurrió mientras el pequeño intentaba defender a su madre.
Aurelia fue asesinada durante la madrugada de este pasado lunes por su esposo, quien llegó es estado de ebriedad y con un cuchillo la apuñalo 26 veces hasta quitarle la vida.
PENA MÁXIMA PARA FEMINICIDA
Desde el comando departamental de la policía y la Fiscalía de Cochabamba se informó que, en audiencia de procedimiento abreviado, se demostró que Simeón Jiménez Quinto, de 38 años de edad, es autor del delito de Feminicidio e Infanticidio en grado de Tentativa cometido en contra de su concubina Aurelia C.V. de 33 años y su hijo de 6 años, por ello, el Juzgado Mixto Civil y Comercial de Instrucción Penal No. 1 de Capinota dictó condena de 30 años de presidio sin derecho a indulto que deberá cumplir en el penal de El Abra.
“La causa de la muerte, shock hipovolémico por hemorragia externa, la laceración pulmonar del pulmón izquierdo, traumatismo torácico penetrante por arma punzocortante”, explicó el comandante departamental de la policía, Cnl. Jorge Ríos.