Una discusión familiar terminó en tragedia cuando un hijo quemó vivo a su padre. El sujeto le roció gasolina y posteriormente le prendió fuego.
La discusión entre el padre y su hijo por poco termina en un crimen, pues el anciano de 65 años fue quemado vivo con gasolina en el municipio de Yacuiba.
A causa de este hecho, el hombre malherido tuvo que ser trasladado de emergencia al Hospital del Quemado de Tarija, pues presenta quemaduras de tercer grado en el 60 por ciento de su cuerpo.
El director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), Luis Escobar, informó que el hecho sucedió el pasado lunes en dicha ciudad fronteriza, donde los miembros de una familia se habrían agredido físicamente, por esta razón el caso fue investigado en primera instancia por el delito de agresiones físicas.
Según el reporte los dos estaban discutiendo, pasaron a los golpes, pero sin previo aviso el hijo tomó gasolina, roció a su progenitor, le prendió fuego y el hombre en llamas salió a la calle para poder pedir ayuda.
La víctima fue auxiliada por vecinos, familiares y fue trasladado al hospital.
“De acuerdo al reporte, los funcionarios de Yacuiba, tras tomar conocimiento del caso, se dirigieron a la zona donde se reportó el hecho y lograron trasladar al herido hacia el hospital Rubén Zelaya”, mencionó.
Asimismo, Escobar manifestó que el caso fue catalogado por parricidio en grado de tentativa y por esta razón, el hijo de la víctima fue aprehendido y conducido a celdas policiales de la FELCC.
“Gracias a la oportuna reacción de los familiares, el hombre fue salvado, pues su familiar quería acabar con su vida”, refirió.
FUE TRASLADADO A TARIJA
Finalmente, el reporte indicó que el afectado tuvo que ser trasladado de emergencia al Hospital del Quemado en la ciudad de Tarija, pues tenía quemaduras severas en la mayor parte de su cuerpo.
Según las leyes el delito de Parricidio tiene una pena única de 30 años de privación de libertad de acuerdo a lo establecido por el Código Penal de Bolivia. /Red Uno