Un cincuentón depravado viola a su hija adolescente

La fiscal del departamento, Carla Oller Molina, ha informado que luego de realizar la valoración de los antecedentes presentados por el Ministerio Público y las defensas, el juez de sentencia de Entre Ríos, ha determinado sentenciar a 25 años de cárcel a un hombre de 58 años de edad, quien ha violado a su hija de 17 años, además producto del hecho la habría embarazado.
“En este caso hubo suficientes elementos de prueba, ya que la víctima dio a luz a un bebé, producto de las agresiones sexuales que padeció durante varios años, eso se ha presentado a la juez del caso y por ello se ha determinado la condena”, ha añadido.
Asimismo, ha indicado que luego de dar lectura a la sentencia las partes tienen un tiempo de 15 días para poder presentar la apelación caso contrario se trasladará al sujeto al penal de Tarija donde cumplirá su condena.
“Se realizó un importante trabajo para presentar ante el juez de sentencia y eso hizo que no queden dudas en la sentencia”, ha mencionado.
La víctima se encuentra recibiendo apoyo de parte de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia como también de otras instituciones, ya que se encuentra con traumas por los vejámenes que sufrió a manos de su padre.
Por otra parte, los familiares de la víctima se encuentran relativamente contentos con la determinación.
El Código Penal en su artículo 308 (Violación de infante, niño o adolescente) refiere: Si el delito de violación fuere cometido contra persona de uno u otro sexo menor de catorce (14) años, será sancionado con privación de libertad de veinte (20) a veinticinco (25) años, así no haya uso de la fuerza o intimidación y se alegue consentimiento. En caso que se evidenciare alguna de las agravantes dispuestas en el Artículo 310 del Código Penal, y la pena alcanzara treinta (30) años, la pena será sin derecho a indulto. Quedan exentas de esta sanción las relaciones consensuadas entre adolescentes mayores de doce años, siempre que no exista diferencia de edad mayor de tres (3) años entre ambos y no se haya cometido violencia o intimidación.