Es habitual que haya provocaciones antes de cualquier evento de los deportes de contacto, sea boxeo, MMA u otra arte marcial de esa índole, ya que sirven para vender el espectáculo. La tensión sube en las conferencias de prensa y pesajes donde los protagonistas llegan a veces empujarse o agredirse verbalmente. Pero en Bielorrusia todo se salió de control: un luchador le pegó un rodillazo volador a su oponente frente a las cámaras.
En las imágenes, que no tardaron en viralizarse en las redes sociales, aparecen dos peleadores listos para una sesión de fotos de cara su pelea promocionada por la empresa Zames Fight Club. En la previa del evento anunciado como ZAMES FC 3, que estaba programado para llevarse a cabo en la ciudad Minsk.