Estados Unidos
Una iglesia cristiana en el área de Chicago (Illinois) ha provocado polémica con un pesebre inspirado en la política migratoria de la Administración Trump con el recién nacido Niño Jesús esposado y cubierto con papel aluminio como en los centros migratorios, y una virgen María con máscara lacrimógena.
«Si Jesús hubiera nacido en Estados Unidos ahora mismo, ¿cómo sería su pesebre?'», se preguntaron los responsables de la iglesia bautista Lake Street, de la vecina ciudad de Evanston, al norte.
«Comenzamos a hablar sobre cómo íbamos a representar lo que estaba ocurriendo, conectado con la historia sagrada. Una familia inmigrante que tuvo que huir al ser perseguida por el rey Herodes. Vimos paralelos», declaró Jillian Westerfield, la ministra asociada.
El resultado no tiene nada que ver con la tradicional representación de la Navidad, con escenas pacíficas del recién nacido en un pesebre, con sus padres, ángeles, pastores y sus animales observando en oración.
POLÉMICA
En Evanston, las imágenes son duras y han molestado a muchos.
María y José usan máscaras para protegerse de gases lacrimógenos y otras armas químicas, el Niño Jesús tiene las manos atadas y está cubierto por una manta de papel de aluminio como las usadas en el centro de detención de inmigración, y cerca hay centuriones enmascarados con gafas de sol y chalecos verdes del ICE.
Westerfield, encargada de la instalación, dijo que buscaron reimaginar el pesebre como una escena de separación familiar forzada, estableciendo paralelismos entre la experiencia de la sagrada familia como refugiada, y las prácticas contemporáneas de detención de inmigrantes. Las máscaras protectoras usadas por María y José aluden a las armas químicas usadas por el Gobierno contra la gente en Chicago y Evanston.
Westerfield admite que son imágenes inquietantes, pero dijo que la gente no debería estar molesta porque esto le está sucediendo a muchos, no a un muñeco o maniquí como los del pesebre.
Agencias.
