Sucre
El suboficial de Policía que durante cinco años violó a una adolescente no solo cometió ese delito, sino que también la prostituyó bajo el chantaje de que, si no accedía a sus peticiones, iba a publicar fotos íntimas de ella manteniendo relaciones sexuales con otras personas.
Esta historia comenzó en 2017, cuando la muchacha tenía 13 años y Rafael M.D.E., 42. Fue un cabo de Policía quien hizo que se conocieran y, pese a la diferencia de edad, el suboficial la contacto vía WhatsApp.
Un día de esos le dijo: “Me gustas, ¿quieres salir conmigo?”. De ahí en adelante, supuestamente, se inició una relación sentimental, según el testimonio que brindó la víctima a la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv) de Chuquisaca.
El hombre empezó a prometerle cosas. “Ya no vas a trabajar”, “yo te voy a mantener”, “. La convenció de tener relaciones sexuales cuando tenía 13 años, pese a que ella manifestó resistencia.
A partir de entonces, las violaciones se fueron sucediendo una tras otras hasta que la adolescente cumplió 17 años. Las perpetraba en moteles, quebradas y lugares alejados de la ciudad, adonde el policía la llevaba en su propio vehículo. Incluso, en una oportunidad, la violó en la casa de un hombre que cumplía arresto domiciliario y donde Rafael trabajaba como escolta policial.
En medio de esta relación ilegal, la muchacha empezó a recibir mensajes y amenazas de desconocidos vía WhatsApp. La acusaban de estar con un hombre casado y le advertían que publicarían videos de ella desnuda.
Ella le comentó de esto al suboficial, quien le contestó que él se encargaría de resolver la situación. Pero, al poco tiempo, le dijo que, para que se acabaran las amenazas, le pedían un video en el que ambos estuvieran manteniendo relaciones sexuales. Ella lo rechazó de plano; sin embargo, un tiempo después, siendo manipulada, aceptó. El uniformado hizo que estas escenas fueran grabadas en el centro policial de Poconas mientras cumplía su turno.
El chantaje y la manipulación del policía fueron creciendo hasta que logró prostituir a la adolescente ofreciéndola a amigos, no solo con un hombre, sino que con dos y hasta con tres al mismo tiempo y la grababa. Agencias