A mediodía de este viernes, una joven de 22 años llegó a lo alto del puente del Viaducto e intentó lanzarse.
La decisión de quitarse la vida, según comentó a Red Uno, la tomó porque aún no se hizo justicia por el abuso sexual que sufrió el año pasado. Ya realizó la denuncia, pero no se tomó ninguna acción contra el agresor.
«Vine a este puente porque ya no aguanto mi situación, no se hace justicia, porque he sufrido una violación y mi papá vendió por dinero. Quiero que mi papá entre a la cárcel, él tiene la culpa de todo, porque a ese agresor lo está escondiendo», declaró a la Red Uno.
La víctima contó que fue violada por su exempleador, Marcelo E.G., en junio de 2021, en el municipio de Sipe Sipe. A donde había ido para realizar trabajos de costura.
Sin embargo, en lugar de apoyarle con la denuncia, su padre habría llegado a un acuerdo económico con el agresor.
«Mi papá hizo un contrato con ese hombre, me vendió por 2.000 bolivianos y que ahí no pasó nada», reclamó.
De momento, la joven fue acogida en el refugio del colectivo Mujeres de Fuego, pero le habrían dicho que ya no se puede quedar ahí.
«Mujeres de Fuego me llevaron al refugio. Ahora, se están denegando a ayudarme. Dentro de muy poco voy a salir de ese refugio temporal», indicó.
La joven sobrevive vendiendo dulces, chicles y barbijos en las calles. «Con eso me estoy sustentando», apuntó.
La víctima tiene un grado de discapacidad y un problema en la pierna.
Posteriormente, la policía llegó al lugar y logró persuadir a la joven, que fue conducida a dependencias de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV).
Cuando se conoció la denuncia, Red Uno se contactó con la joven. En ese entonces, ya había insinuado que quería quitarse la vida.